Los comerciantes de Gràcia han estallado tras la salvaje agresión que este viernes dejó, en estado crítico, al gerente de uno de los negocios del barrio. La víctima ha sido Chen Moraes, un maestro de Jiu-Jitsu que regenta una academia en la Travessera de Gràcia donde imparte clases de este arte marcial. El propietario del gimnasio vio como tres individuos intentaban asaltar a una pareja de turistas franceses, ante lo que salió a su auxilio en lo que se convirtió en una pelea entre él y los tres ladrones en la que el trabajador sufrió heridas de gravedad.
El suceso no ha sorprendido excesivamente en el barrio. Vecinos y comerciantes son testigos de los múltiples conflictos que se dan en la zona, a raíz de una delincuencia que no deja de incrementarse, al mismo tiempo que los recursos policiales son escasos. Así lo denuncia a este medio Ramon Gasulla, presidente de la Associació de Comerciants de Nova Travessera i en Camp d'en Grassot, quien reclama que se tomen medidas ante una escalada de la inseguridad que ha ido demasiado lejos.
SIN MOSSOS NI URBANA
El líder del citado colectivo denuncia la falta de seguridad que sufre el barrio, una situación que hace extensible al resto de la ciudad. "Hay una falta de seguridad, no solo en el barrio, sino en toda Barcelona. La delincuencia va in crescendo", lamenta el portavoz.
Ante esta situación, Gasulla reclama al concejal de Seguridad, Albert Batlle, y al consejero de Interior, Joan Ignasi Elena, que tomen cartas en el asunto mediante una mayor dotación policial en la zona. "Pedimos que pongan soluciones. Faltan Mossos y Guardia Urbana en la zona de Travessera. La única comisaría que hay es la de la Guardia Civil, pero no tienen competencias", recuerda este comerciante.
El presidente de la asociación insiste en que el suceso de este viernes no ha sido un caso aislado, ya que se trata de un hecho delincuencial que se suma a otros que han sucedido durante los últimos meses en calles como la de El Escorial o la de Pau Alsina.
"BUEN VECINO"
Sobre Moraes, el portavoz del colectivo de comerciantes subraya que es un "buen vecino" y que Anaconda Brazilian Jiu-Jitsu, el gimnasio que regenta, es "uno de los comercios más antiguos de la zona".
El maestro, que recibió cortes muy profundos en los brazos y en una pierna tras salir en defensa de los turistas asaltados, continúa hospitalizado. Un claro aviso para que las administraciones tomen medidas antes de que los residentes y comerciantes del barrio tengan que lamentar más sucesos como este.