La Administración gallega reclama 485 euros a un joven de 20 años que murió en un trágico accidente de moto en verano de 2020. La víctima se llamaba Josep Boan Rosanes y era vecino del barrio de Sants. Tal como consta en la factura, a la que ha tenido acceso Metrópoli, piden al fallecido que asuma los costes de la asistencia al siniestro.

Cabe recordar que este joven de 20 años fue una víctima mortal de una imprudencia grave por parte de Asier, el conductor de un coche que iba a 130 kilómetros por hora en sentido contrario cuando embistió mortalmente a Boan. La Diputación de la Coruña pretendía que el fallecido asumiera los gastos de la limpieza de la carretera y de los bomberos.

Piden 485 euros a la víctima mortal de un accidente de tráfico / CEDIDA

"Un conductor homicida mata a mi hijo y la Diputación le ha enviado una factura por la asistencia y limpieza de la vía. Josep Boan y Rosanes debe pagar, a partes iguales con su homicida, Asier González Silva, las 3 horas y 20 minutos que emplearon para limpiar sus restos. Me han destrozazado. Dolor infinito, humillación intolerable. ¿Cuánta más indiferencia de las administraciones y del sistema judicial debemos soportar?", explica Pilar, la madre de la víctima en sus redes sociales.

DOS AÑOS Y MEDIO DE CÁRCEL PARA EL HOMICIDA

Según La Opinión de la Coruña, el Consorcio de Bomberos anulará la multa y la abonará al autor del homicidio imprudente, que ha sido condenado a dos años y medio de cárcel y a la retirada del carnet de conducir.

Noticias relacionadas