
La Casa Orsola de Barcelona antes del desalojo de este viernes, 31 de enero
Foment defiende la propiedad de Casa Orsola de Barcelona y exige a las administraciones que dejen de presionarla
La patronal ha reivindicado que se cumpla con la ley y las sentencias judiciales a la vez que ha criticado que se usa con mucha ligereza el término 'especulación'
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Foment del Treball ha insistido en defender el derecho a la propiedad privada y ha expresado su apoyo al dueño del edificio de Casa Orsola de Barcelona, Albert Ollé, tras una carta hecha pública en la que la propiedad expresa que se plantea vender la finca.
Esta carta se ha publicado unas horas después del anuncio de la nueva fecha del desalojo de su primer inquilino, aplazada nuevo hasta el 18 de febrero.
Campaña de desprestigio
Foment ha denunciado en un comunicado la campaña de desprestigio, ocupaciones ilegales e incluso actos vandálicos que han deteriorado durante los últimos tres años un patrimonio modernista "que el propietario quería preservar".
"Es una mala noticia para Barcelona y para Cataluña que empresarios catalanes deciden dejar de invertir en nuestro país", han lamentado y han recordado que si la propiedad vende el edificio a otro comprador pueden encontrarse con un "auténtico especulador" que no tendrá ningún interés en preservar el patrimonio ni en llegar a acuerdos.
Cesar las presiones
El presidente, Josep Sánchez Llibre, ha exigido que hay que respetar la ley y que la propiedad de la emblemática casa ha actuado "de manera ajustada al Derecho".
Ha aseverado que las Administraciones Públicas deberían ayudar a Ollé y no presionarlo "hasta extremos muy próximos a la coacción".
"Es fundamental recordar que las leyes -también las que regulan el alquiler de vivienda- son aprobadas por los parlamentos, son aplicadas por los jueces y es obligatorio cumplir las sentencias que estos dictan", ha explicado.
"Esto es lo que dice la Constitución. Sin este respeto, el Estado de Derecho se hunde", ha añadido.
Rechazo a las críticas de especulación
En el comunicado, la patronal catalana ha condenado a aquellos que utilizan el caso de la Casa Orsola "por, supuestamente, defender el derecho a la vivienda", ya que el propietario no es un especulador, en su opinión, sino una persona que ha actuado "conforme al Derecho".
Además, han criticado que se usa con mucha ligereza términos como 'especulación' que aportan confusión, "como si algunos de los inquilinos desahuciados se encontrarán en situación material de vulnerabilidad", han matizado.
En contraposición, han criticado que se habla poco de "instrumentalización o del señalamiento de responsables de una situación preocupante en el país como es la dificultad de acceso a la vivienda".