Manifestantes del sábado, 6 de julio, contra la masificación turística en Barcelona

Manifestantes del sábado, 6 de julio, contra la masificación turística en Barcelona Lorena Sopena -EP

El pulso de la ciudad

“Tourists go home”: vuelve a Barcelona la manifestación contra turistas y se pide llevar pistolas de agua

Los organizadores han convocado una movilización por el centro de la capital catalana el próximo 15 de junio y han defendido que las pistolas representan un "símbolo popular de la resistencia al expolio del monocultivo turístico"

Barcelona es la ciudad turística más masificada del mundo, según un estudio

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Barcelona vivirá una nueva jornada de protesta ciudadana contra el modelo turístico vigente. La Asamblea de Barrios por el Decrecimiento Turístico (ABDT) ha convocado para el próximo 15 de junio una manifestación bajo el lema: “El turismo nos roba pan, techo y futuro: defendemos la ciudad, decrecimiento turístico ¡YA!”.

La marcha, que recorrerá el centro de la capital catalana, busca denunciar no solo la masificación turística, sino lo que los organizadores definen como turistización estructural: la subordinación de la ciudad y sus recursos a los intereses del sector turístico.

Desde la organización han asegurado que la protesta no solo es contra la masificación, sino también "contra la turistización y el decrecimiento turístico", han afirmado en un comunicado. 

Turistas en Barcelona

Turistas en Barcelona EUROPA PRESS

"La masificación es uno de los muchos impactos que ésta provoca, y ni siquiera de los más graves. Los medios de comunicación y la industria siguen situando el foco en el número de turistas, lo que no hace sino desviar la atención y silenciar los beneficios millonarios de esa maquinaria extractivista", aseguran en un comunicado.

Pistolas de agua como símbolo

Inspirados en una acción reciente en la Sagrada Família —donde activistas dispararon con pistolas de agua a autobuses turísticos— los convocantes invitan a los asistentes a llevar juguetes y pistolas de agua como símbolo de protesta lúdica y pacífica.

Estas acciones, aseguran, representan un "símbolo popular de la resistencia al expolio del monocultivo turístico", al que acusan de deteriorar la vida cotidiana, encarecer la vivienda y expulsar a los vecinos de sus barrios.

Turistas en las inmediaciones de un hotel

Turistas en las inmediaciones de un hotel David Zorrakino / Europa Press

Protestas simultáneas en otras ciudades

La manifestación en Barcelona formará parte de una jornada de movilización estatal, con protestas previstas también en San Sebastián, Palma e Ibiza, donde el turismo también genera fuerte presión social y medioambiental.

Colectivos ecologistas como Ecologistas en Acción y sindicatos de trabajadores del sector turístico ya han anunciado su adhesión a la convocatoria, sumándose a una protesta que, según los organizadores, quiere reivindicar que "no se puede manchar la idílica imagen de postal de la ciudad, construida sobre la explotación y el empeoramiento de las condiciones de vida de su población". 

Manifestación masiva en Barcelona contra la masificación turística

Manifestación masiva en Barcelona contra la masificación turística CUP

Antecedentes: el caso de 2024

Este 2025 se volverá a repetir la protesta del año pasado, donde la manifestación contra la masificación turística, celebrada el 6 de julio, acabó con los manifestantes disparando con las pistolas de agua a los turistas con los que se cruzaban. 

La protesta, organizada por el mismo colectivo, logró reunir a miles de personas en las semanas previas a la Copa América, en una demostración del creciente malestar ciudadano con el rumbo turístico de la ciudad.

La acción reivindicativa llamó la atención de los medios de comunicación, incluso de la BBC. La televisión británica se hizo eco de la curiosa técnica de los barceloneses para “ahuyentar” a los turistas. 

La reivindicación recibió el rechazo del Ayuntamiento de Barcelona. “Protestar contra el turismo masivo debe ser compatible con el respeto hacia las personas que visitan Barcelona”, aseguró el teniente de alcalde de Economía, Jordi Valls.