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Nuevo varapalo judicial a la reforma de la Via Laietana de Barcelona, justo cuando apenas cumple un mes de su estreno tras finalizar las obras.

El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 14 ha aceptado el recurso de la Barcelona Oberta y, por segunda vez, invalida el acuerdo municipal de 2022 de la Comisión de Urbanismo que dio luz verde a los trabajos.

Se trata de una arteria principal

En una sentencia avanzada por La Vanguardia y que el Ayuntamiento recurrirá, el juez considera que el Ayuntamiento, en ese entonces gobernado por Ada Colau, no siguió los pasos legales adecuados para modificar la Via Laietana y lo trató como un proyecto de obra ordinario.

Al tratarse de una arteria principal de la ciudad, su alteración exigía una modificación del Plan General Metropolitano (PGM).

El fallo

"Una vez visto que la Via Laietana tiene la función de vial de accesibilidad metropolitana y no estrictamente local o de barrio, se ve que el Proyecto Ejecutivo de reurbanización encubre una modificación de las determinaciones esenciales que el PGM atribuye a la Vía Laietana sin seguir el procedimiento legalmente previsto para ello", asegura el fallo.

En vez de una modificación del PGM, el consistorio enmarcó la reurbanización de la calle en el Proyecto urbanístico global 'Superilla Barcelona",

Barcelona defiende la reforma

La primera teniente de alcalde, Laia Bonet, ha confirmado que recurrirán el fallo y ha afirmado que están "seguros" del buen trabajo que se ha hecho desde los despachos para la legalidad de esta transformación urbanística.

"Defendemos la reforma de la Via Laietana, como también defendimos la pacificación hecha en Consell de Cent porque son transformaciones que han venido para quedarse y, por tanto, que no nos echaremos atrás", ha añadido en declaraciones a los medios este viernes.

Ha defendido que las pacificaciones son el camino que seguirá la ciudad y ha lamentado la "judicialización constante del urbanismo los últimos años".

Los ejes comerciales celebran la sentencia

Este pronunciamiento judicial llega después de que diversas entidades del tejido vecinal y empresarial expresaran reiteradas veces su rechazo a la reforma.

Denuncian que el proyecto se ha ejecutado sin un verdadero consenso ciudadano y con un único objetivo: "restringir drásticamente la circulación del vehículo privado".

En un comunicado, la Unió d’Eixos Comercials de Barcelona (Barcelona Oberta) ha criticado que la Via Laietana se ha convertido en un único carril de subida compartido entre autobuses y vehículos privados, en un trazado de 1 km "sin vías de escape".

Estas obras provocan congestiones en el tráfico y limita severamente el acceso al distrito de Ciutat Vella, afectando especialmente a trabajadores, servicios, comercio, restauración y transporte de mercancías.