La seguridad de las playas de Barcelona: en jaque por una "gestión deficiente" de los servicios mínimos

Quien siembra vientos recoge tempestades, que reza el refrán y el Ayuntamiento de Barcelona encara un serio problema de seguridad para los bañistas en las ocho playas de la ciudad. Tanto, que a pesar del "pulso" que desde la administración estaban dispuestos a echarle a los socorristas en huelga, han aceptado acudir a reuniones de mediación entre los trabajadores, la empresa FCC y el mismo gobierno municipal.

Para llegar a este punto, no obstante, se han tenido que dar hasta cuatro intervenciones el pasado fin de semana en la playa: dos salvamentos que, según explican a Metrópoli desde el sindicato CGT, fueron casos leves y habituales y otros dos que requirieron de hospitalización en estado grave.

El primero de estos dos últimos casos fue un apneísta que sufrió una hidrocución mientras buceaba por la playa. El segundo, fue un hombre de más de 80 años. Los dos sufrieron ahogamientos y fueron rescatados por los socorristas. Este último caso requirió de maniobras de reanimación.

Los dos bañistas salvaron la vida gracias a la rápida intervención de los socorristas que estaban trabajando en el marco de los servicios mínimos. No obstante, tanto el señor mayor como el apneísta sufrieron los ahogamientos frente a torres cerradas.

Ambos casos revelan huecos en la cobertura del litoral, pues faltan profesionales para todas las playas, algo que desde la plantilla se valora como una "mala gestión" del personal disponible en el marco de la huelga.

Un socorrista vigila una playa de Barcelona | AYUNTAMIENTO

Faltan socorristas

Y es que, en pleno agosto, y a causa de la huelga, de los 80 socorristas --una plantilla ya infradimensionada, se ha decretado unos servicios mínimos del 50%. El cálculo es sencillo, debería haber cerca de 40 socorristas operativos.

CGT, no obstante, asegura que a causa de "una mala planificación" a la hora de planificar los turnos, solo hay 23 profesionales del salvamento trabajando en turnos de 9 horas y repartidos por las ocho playas que conforman el litoral barcelonés.

Seguridad insuficiente

La única medida de seguridad tomada por parte del Ejecutivo local para velar por la seguridad del bañista ha sido la de colocar bandera amarilla en aquellas zonas sin vigilancia, desoyendo de nuevo la petición de los socorristas, que pidieron que se izara la bandera roja.

De hecho, este fue uno de los dos actos que protagonizaron la protesta del pasado martes. Los trabajadores cerraron las torres de guardia e izaron bandera roja en el litoral. Desde que arrancó la huelga el pasado 1 de agosto, han combinado las manifestaciones con paseos informativos a los bañistas.

Una torre de vigilancia de Barcelona cerrada por la huelga de los socorristas CGT Socorristas

"Agradecemos la buena recepción por parte de la gente cuando les explicamos que estamos en huelga y las causas de la misma. También les invitamos a que, de querer bañarse, lo hagan delante de las torres abiertas con socorristas operativos. A pesar del parón, seguimos comprometidos con la seguridad de los bañistas", aseguran los socorristas.

No obstante, en los últimos cinco días, y con la excepción de esta reunión de mediación solicitada por la parte social, "no hemos tenido noticias del Ayuntamiento". Desmienten así a la primera teniente de alcalde, Laia Bonet, que aseguró que se estaban manteniendo conversaciones constantes con la plantilla.

Motivos de la huelga

También se afearon a la concejal que sacara a colación la cuestión salarial cuando "a pesar de llevar desde 2016 con el sueldo congelado no está entre los motivos que impulsan esta huelga" y recuerdan que la misma se debe "al incremento de la temporada alta, ampliación de la plantilla y la mejora de los módulos de salvamento".

Una torre de vigilancia de Barcelona cerrada por la huelga de los socorristas CGT

Otra de las grandes críticas giró en torno al supuesto aumento presupuestario de la licitación, un aumento esgrimido por Bonet y que, según el sindicato, se destinó a la ampliación de servicios y funciones durante el desarrollo de la Copa América de Vela.

Por el momento, queda por ver si la mediación desde la Generalitat logrará acercar posturas entre las partes, que por el momento se muestran antagónicas. El cuarto teniente de alcalde, Jordi Valls, ha expresado la "voluntad" de alcanzar acuerdos en la negociación, si bien fuentes presentes en la negociación desmienten estas intenciones.

No obstante, desde el consistorio se ha lanzado una propuesta que la plantilla valorará en asamblea. Si bien la huelga sigue adelante, el sindicato ha anunciado que preventivamente pausará las acciones de protesta hasta alcanzar una decisión consensuada con los trabajadores.