Un simple paseo por Barcelona es suficiente para darse cuenta de que las terrazas y las heladerías han comenzado su particular temporada alta. El verano es época de helados. Sin embargo, cuando hay que prestar especial cuidado a los ingredientes, la cosa se complica.
Por ello, a continuación hemos realizado una selección de los mejores locales en los que podrás rendirte a tus sabores favoritos, independientemente de las diferentes intolerancias alimenticias o de tus preferencias a nivel gastronómico.
GELAAATI DI MARCO
Haberse posicionado como una de las heladerías más conocidas de la ciudad catalana no es fruto de la casualidad. Todos los helados de Gelaaati Di Marco están especialmente elaborados para ser lo más saludables posible, gracias a sus ingredientes naturales y a la ausencia de colorantes y conservantes.
Además, su amplia carta de sabores está adaptada para todo tipo de necesidades alimenticias, ofreciendo una gran selección de sabores completamente veganos. Si te gusta la propuesta, la encontrarás en la calle Llibretería, 7.
LLAOLLAO
Llaollao es una de las franquicias con más presencia en toda España. Sus infinitos sabores han convertido a esta cadena como una de las más buscadas durante el verano. Y es que cada vez tiene presencia en más ciudades. En Barcelona cuenta con un establecimiento en el centro comercial Gran Vía 2.
Una de sus señas de identidad es que sus productos en ningún caso contienen gluten. Aunque ante cualquier duda es importante saber que en todos sus establecimientos se puede consultar la lista de los alérgenos de cada uno de sus productos.
SHANTI GELATO
Shanti Gelato es otro de los templos imprescindibles para todas las personas con intolerancia o alergias a determinados ingredientes. Ofrece una gran carta de sabores en los que se ha eliminado la presencia de lactosa o gluten, por ejemplo. Además, también tiene una sección dedicada específicamente a los productos veganos.
Se encuentra ubicada en la calle de Canvis Vells, 2. Y, especialmente en estas fechas, es habitual tener que hacer cola en la entrada debido a la gran cantidad de gente que es capaz de aglutinar.