Aquí están los mejores niguiris de la ciudad

Barcelona es una de las ciudades con una mayor diversidad en el ámbito de la restauración que existe en toda España. Gracias a la influencia que el turismo tiene en la cultura gastronómica, podemos encontrar locales que sirven comida típica que proviene de cualquier parte del mundo. Y, como no podía ser de otro modo, la comida japonesa está atravesando uno de sus mejores momentos de forma en la capital.

A continuación vamos a realizar un pequeño recorrido que nos llevará a conocer los principales restaurantes de comida de esta región. En ellos, podrás disfrutar del sabor de los mejores niguiris. Esas pequeñas piezas de arroz y pescado capaces de conquistar los paladares más exigentes.

WAKASA

Situado en la calle Nàpols, 287, Wakasa se ha posicionado como uno de los locales más conocidos de la Ciudad Condal. Característico por pertenecer al movimiento slow food, en el que las prisas no tienen lugar, es una de las mejores opciones para todos los amantes de los niguiris. Todos sus platos son cocinados por el dueño del restaurante, asegurando la máxima calidad en cada uno de sus servicios.

El Wakasa forma parte del recorrido gastronómico de más calidad que se puede encontrar en Barcelona. El mimo con el que están hechos todos sus platos, además del sabor de los mismos, hace de este local una de las mejores experiencias para todo tipo de paladares.

SAKURA-YA

El centro comercial de La Illa Diagonal, situado en la avenida Diagonal 557, acoge otra de las propuestas gastronómicas más conocidas. Toda su comida se sirve en barra, replicando el típico modelo japonés. Pese a que sus platos no son muy generosos, sus productos elevan la calidad a un nivel superior.

Es una de las mejores opciones para disfrutar del sabor auténtico de los mejores niguiris.

URIBOU

Sin salir del mismo barrio, en la calle Taquigraf Serra, está ubicado otro de los templos del niguiri en Barcelona. Contiene una de las cartas más completas que existen en la capital catalana y el secreto del buen sabor que desprenden todos sus emplatados lo encontramos en el hecho de que cuenta con las mínimas salsas posibles, centrando todo el sabor en la propia pieza.

Su relación calidad precio es una de las mejores de la ciudad, lo que hace un habitual que haya que reservar para poder disfrutar de una velada en la mejor compañía.