El Bar Bruxas, un emblemático establecimiento del Poblenou, cerrará sus puertas el próximo 25 de febrero.
A partir del día siguiente, un nuevo propietario tomará el relevo, aunque aún no se ha revelado qué tipo de negocio ocupará su lugar.
Este cierre supone una pérdida para el barrio, ya que el bar era un punto de encuentro habitual, especialmente para los amantes de los esmorzars de forquilla los fines de semana.
Durante la semana, ofrecía un menú casero muy apreciado por los vecinos de Sant Martí.
Bar Bruxas
El local
El local, con su terraza soleada, su barra de aluminio y su comedor funcional, mantenía la esencia de los bares de toda la vida.
En su interior, las mesas siempre estaban ocupadas por grupos de jubilados jugando al dominó.
En verano, un ventilador de aspas colgante ayudaba a sobrellevar el calor de las tardes más sofocantes.
La historia del bar
El bar comenzó su andadura hace dos décadas, cuando el anterior negocio, un club de petanca, se transformó en el actual establecimiento.
Desde entonces, la petanca dejó paso a las partidas de cartas, mientras el Bruxas se convertía en un punto de referencia del barrio.
Ahora, su historia llega a su fin, dejando atrás dos décadas de tradición y encuentros vecinales.