Este pasado fin de semana, Àngels Chacon fue escogida por la militancia del Partit Demòcrata Català (PDECat) como candidata de la formación postconvergente a las elecciones al Parlament de Cataluña del próximo 14 de febrero. Esta noticia es la última consecuencia de la más que evidente ruptura entre el PDECat y el nuevo Junts per Catalunya (JxCAT), el artefacto político creado por el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. ¿Hasta qué punto afecta esta decisión a los cargos de ambas formaciones en algunas zonas de Barcelona?

A principios de septiembre de este año, se hizo oficial ante la opinión pública de la ciudad algo que ya llevaba tiempo cociéndose entre bambalinas. La noticia fue que la ejecutiva del PDECat en Gràcia abandonaba en bloque el partido y se sumaba a JxCAT. Todos ellos pasaron a engrosar la lista de militantes de la formación de Puigdemont y fueron elegidos miembros de la nueva ejecutiva de JxCAT en el distrito. Siguieron los pasos de su jefe de filas, Ferran Mascarell, presidente del distrito de Gràcia. 

DIVISIONES INTERNAS

No obstante, los seguidores de Puigdemont no tenían control sobre toda la sección local de Gràcia. Ninguno de los tres consejeros de distrito, Sílvia Mayor (también portavoz), Sílvia Manzano y Xavier Farrés, dejó el PDECat. Todo lo contrario. Mayor, Manzano y Farrés están muy comprometidos con el objetivo de mínimos que tiene a corto plazo su formación: hacer que Chacon entre como diputada en la cámara legislativa catalana. 

Fuentes de JxCAT en el Ayuntamiento de Barcelona han confirmado a Metrópoli Abierta la decisión particular de los tres concejales de distrito de quedarse en el PDECat. A medio plazo, y por cuestiones prácticas, todo apunta a que Mayor, Manzano y Farrés se van a quedar bajo el nombre de JxCAT en el distrito de Gràcia hasta mayo de 2023, cuando se producirán las próximas elecciones municipales. Luego, a partir de esta fecha, cada parte del conflicto "irá por libre".   

Por si fuera poco, tampoco queda claro a quién pertenece a partir de ahora la sede del PDECat en Gràcia. Esta cuestión, enmarcada en el contexto de la polémica disputa por el nombre de la nueva formación independentista, está judicializada y será la titular del Juzgado de Primera Instancia número 3 de Barcelona quién decidirá si se la queda la nueva marca de Puigdemont o la que lidera David Bonvehí.  

DIFERENCIAS INSALVABLES

¿Pero por qué se ha llegado a este nivel tan alto de discrepancias entre cargos y ejecutiva en Gràcia? ¿Qué es lo que ha roto en pedazos el proyecto de sucesión de la antigua Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) en esta zona del corazón de la capital catalana? Fuentes cercanas al PDECat gracienc apuntan a dos motivos: "Un problema de hiperliderazgos y otro de indefinición ideológica". 

Ferran Mascarell junto a Carles Puigdemont en una imagen de archivo / EFE  



Según explican las mismas fuentes, los tres consejeros de distrito "no ven a Carles Puigdemont como un líder que les represente". Además, discrepan con que el pacto proritario de JxCat y ERC para gobernar tanto en Cataluña como en varios municipios sea la CUP, considerada por los miembros del PDECat como una formación "demasiado radical". 

¿PACTO A TRES BANDAS?

Por todo ello, una inmensa mayoría de los miembros del partido liderado por Bonheví verían con muy buenos ojos un posible pacto a tres bandas en la Generalitat entre JxCat, ERC y el PDECat, que haría dejar de depender de los anticapitalistas a la hora de formar gobierno.

Anna Saliente, alcaldable de la CUP en 2019, en pleno mitin electoral / EP



El problema de esta ecuación es que las últimas encuestas que hacen seguimiento de la intención de voto a escala catalana no les auguran los mejores presagios, precisamente. De hecho, ni la última del GESOP para El Periódico de Catalunya en julio ni la última de GAD3 para La Vanguardia en septiembre les otorga escaño alguno.

INDEPENDENTISMO DE CENTRO

Más allá de lo que puedan decir las encuestas, el PDECat se centrará a partir de ahora en buscar el apoyo de aquellos catalanes favorables a la independencia del territorio pero cuya ideología es más centrista. De ahí que el lema de la nueva campaña para las próximas autonómicas sea Centrem el país (Centremos el país, en castellano). 

Este fin de semana, Chacon, tras ser escogida como candidata a la presidencia de la Generalitat, dejó muy claras sus intenciones en el futuro más inmediato: “Somos independentistas, sí, pero no queremos renunciar a nuestro modelo de país.”

La candidata del PDECat a la Presidencia de la Generalitat, Àngels Chacon / EUROPA PRESS



Además, la exconsellera de Empresa también pidió “respeto” y “reconocimiento” para la “diversidad ideológica” del soberanismo, después de censurar que el nuevo partido de Puigdemont quería diluir la ideología del PDECat en su nuevo proyecto político. 

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