El Partido Popular ha presentado este martes un pliego para llevar a la próxima Comisión de Seguridad el dramático caso de un narcopiso okupado en parte por menores que ha causado el terror entre los vecinos del pasaje de Alió y las calles aledañas, en el distrito de Gràcia.

El portavoz del grupo, Juan Milián, ha exigido al consistorio barcelonés que se lleven a cabo medidas para garantizar la seguridad de los habitantes de la calle a través de la instalación de cámaras de videovigilancia y más control policial por parte de la Guardia Urbana.

En un comunicado, el portavoz ha considerado que "esta okupación no supone solo un ataque a la propiedad privada, también es una cuestión de drogas, de ruido, robos, suciedad y de molestias a unos vecinos que tienen miedo, incluso a denunciar", una situación de la que ya se hizo eco Metrópoli hace poco más de un mes.

El número 21 del pasaje de Alió, un edificio okupado y reconvertido en narcopiso METRÓPOLI

La situación se ve agravada por la presencia, a escasos metros del inmueble conflictivo, de una escuela infantil. Día a día, los vecinos y sus hijos pasan por una zona llena de suciedad, cristales rotos, botellas de alcohol y que sirve de cuartel para un grupo de personas que roba a personas y comercios cercanos, como ya relataron a este digital comerciantes del vecino mercado de la Abaceria.

Al respecto, Milián ha reclamado que se haga valer el derecho de los vecinos a "vivir tranquilos y sin intimidaciones”.