Santa Coloma de Gramenet tiene un problema con los hurtos. Es la ciudad de toda el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) donde más ha subido este tipo de delito. De hecho, en prácticamente todos los municipios –grandes y pequeños– los robos sin violencia han caído en picado durante el primer trimestre de 2021. Solo Santa Coloma, Gavà y Sant Adrià de Besòs registran un incremento de estos delitos. En la primera, flanqueada por Barcelona y Badalona, los hurtos se han disparado un 35%, según datos del Ministerio de Interior. En Gavà y Sant Adrià, con mucha menos población, han subido un 28,1% y un 12,7% respectivamente.
Tomás Fernández, presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Santa Coloma, confirma la gran incidencia de los hurtos en la ciudad. “Se visualizan mucho los robos en los barrios. Se debería combinar la policía de barrio con el patrullaje”, pide el líder vecinal, que echa de menos más presencia de policía de barrio, agentes de proximidad que suelen mantener un contacto estrecho con los vecinos. El salto es destacado. De los 337 hurtos que se registraron entre enero y marzo de 2020, la ciudad ha sufrido 445 hurtos en el mismo período de tiempo de este año.
SUBIDA DE DELITOS
Con 120.443 habitantes, Santa Coloma es la novena ciudad más poblada de Cataluña. Los datos del Gobierno, que reflejan la información de todos los cuerpos policiales del Estado, muestran otro indicador preocupante. Es la segunda localidad del AMB donde más crece el total de infracciones penales (un 15,7% más). Solo supera este repunte Sant Adrià de Besòs, con una subida del 17%. De nuevo, en la inmensa mayoría de ciudades, con contadas excepciones, los delitos caen. En Cornellà de Llobregat (89.936 habitantes) y Sant Boi de Llobregat (84.500), cuya cifra de habitantes se acerca a la de Santa Coloma, los delitos han caído un 7,9% y un 0,2% respectivamente. Los hurtos también van a la baja (-6,7% en Cornellà y -22% en Sant Boi.
Desde Ciudadanos, el líder de la oposición, Dimas Gragera, muestra su preocupación por los índices de criminalidad del municipio metropolitano. “Llevamos tiempo diciendo que el Ayuntamiento niega esta problemática. Pedimos a la alcaldesa (Núria Parlon, PSC) que no se esconda en las redes sociales y que lo reconozca. Se nos ha tachado de alarmistas, pero estamos viendo como nos azota esta problemática”, comenta el también diputado en el Parlament. Gragera pide más policías y rechaza “inventos” como el de los serenos, un grupo de agentes cívicos que atienden pequeños problemas concretos de la ciudadanía.
DOS HOMICIDIOS
Durante el primer trimestre ha habido dos homicidios en Santa Coloma. El año pasado no hubo ninguno. En cuanto a los delitos contra la libertad sexual (agresión, abuso, acoso, etc) se han registrado 10, seis más que los 4 de 2020. Los robos con fuerza en pisos han caído un 51%. Hay que tener en cuenta que las últimas dos semanas de marzo de 2020 las calles estaban vacías debido al primer confinamiento en toda España a causa de la pandemia. Aún así, el balance delincuencial de la ciudad metropolitana no es positivo.
Hace justo un año, Parlon arrancaba al entonces consejero de Interior Miquel Buch la promesa de incrementar los efectivos de mossos d'esquadra en el municipio. Gragera lamenta que ese anuncia solo fue "una fotografía con la alcaldesa que no se ha visto materializado". El concejal naranja insiste en que volverá a pedir al actual conseller Joan Ignasi Elena más policías del cuerpo autoómica en la ciudad.
REUNIONES VECINALES
Gragera se ha reunido en las últimas semanas con vecinos de Fondo y Raval, y que el 10 de junio se desplazará al Singuerlin. Asegura que la "principal preocupación" que le trasladan los residentes son los problemas de incivismo, hurtos, robos con violencia y peleas. Hace unos días, Metrópoli se hacía eco de las denuncias vecinales en el Nuevo Parque de Santa Rosa, donde un grupo de jóvenes han tomado el espacio en el que beben alcohol, trafican y se pelean entre ellos.