El espíritu de la Navidad también ha llegado hasta la Mina de Sant Adrià de Besòs. Los comerciantes y vecinos reivindican la comunidad formada en el barrio con el paso de los años y celebran la festividad más familiar y solidaria del año.
Por este motivo, el barrio organiza dos concursos: uno que premiará la portería mejor decorada y el otro que valorará los comercios mejor engalanados. Ambos tienen como objetivo dinamizar la convivencia en una de las zonas con mayor índice de pobreza de todo el área metropolitana.
RECUPERAR LOS ESPACIOS COMUNES
Desde el Servicio de Soporte y Mediación del Consorcio del barrio expresan su intención de promover la cohesión social entre vecinos y vecinas. Este servicio, además, trabaja todo el año para tratar la prevención y gestión de los conflictos en las diferentes comunidades que coexisten en el barrio.
El concurso de decoración de escaleras en concreto no se celebró durante bastante tiempo por falta de participación. Sin embargo, hace un par de años que la iniciativa se retomó y el año pasado contó con la participación de 17 comunidades de vecinos y vecinas.
IMPULSO AL COMERCIO DE PROXIMIDAD
Decorar las tiendas del barrio es un proyecto que también tiene como objetivo devolver la vida al comercio de proximidad. La Mina cuenta con, aproximadamente, 70 negocios y el 60% son bares. En el año 2007, el Plan de Transformación del barrio preveía un incremento de nuevos comercios tanto en la zona de la Rambla como en la parte del Fòrum. Sin embargo, la grave crisis económica de aquel año paralizó las promociones previstas.
Desde el Consorcio insisten: el comercio es un punto de referencia en la comunidad. El trato es personal y los productos que se ofrecen son, básicamente, de primera necesidad.
"UNA VELA QUE, POCO A POCO, SE APAGA"
La mayoría de comerciantes de la Mina se muestran negativos ante la perspectiva del futuro de sus negocios. "Una vela que, poco a poco, se apaga", es como la definen algunos. "Tenemos problemas de inseguridad y estamos abandonados. La Policía Local pasa por aquí y no hace nada y eso que delante de las tiendas siempre hay personas vendiendo artículos robados", comenta a Metrópoli el propietario de una tienda que lleva 46 años en el barrio.
La venta ilegal prolifera y provoca tensiones entre los comerciantes, que ven cómo sus negocios mueren y la posibilidad de que sus hijos los hereden, se evapora. "Las personas que venían han dejado de comprar".
¿MÁS LUZ ESTA NAVIDAD?
El Ayuntamiento de Sant Adrià, con motivo del encendido de Navidad, anunció como novedad que, este año, el paseo Camarón contaría con "nuevos motivos navideños". Sin embargo, el vecindario del barrio se sigue sintiendo abandonado. "Por aquí no ponen ningún árbol navideño", comenta una vecina. "¿Por qué no se adornan las calles principales? También pagamos impuestos", comenta otra ciudadana. "Solo interesa el centro", sentencia el vecindario del barrio.
La Fiesta de las Luces tuvo lugar el pasado viernes, 3 de diciembre, en la plaza de la Vila de Sant Adrià. La alcaldesa, Filo Cañete, también anunció que las luces permanecerían encendidas toda la noche, ya que el coste era menor de esta manera.