Arranca el juicio contra Aitor, el hombre acusado de asesinar a Janet, desaparecida en Cornellà

La Fiscalía pide 19 años de cárcel para Aitor G.P., un hombre acusado de asesinar a Janet Jumillas, la mujer de 39 años que desapareció en Cornellà de Llobregat en marzo de 2019, y de ocultar su cuerpo, que apareció dos meses después enterrado en un solar.



En un juicio que ha arrancado este viernes en la Audiencia de Barcelona con la constitución del jurado popular, el ministerio público acusa a Aitor G.P. de asesinato con alevosía y, además de la prisión, ha solicitado para el procesado 5 años de libertad vigilada superiores a la pena impuesta e indemnizaciones para los familiares de Jumillas que oscilan entre los 80.000 y los 400.000 euros.

25 AÑOS DE CÁRCEL

La acusación particular ha pedido 25 años de cárcel, mientras que la defensa ha solicitado la libre absolución o alternativamente una condena por homicidio con atenuantes muy cualificadas, de arrebato y de drogadicción.



Según el escrito de acusación provisional de Fiscalía, Aitor G.P. quedó con Janet el 13 de marzo de 2019 en casa del acusado y, cuando la víctima llegó al lugar acordado a media mañana, el presunto autor, "valiéndose de una o varias armas blancas", la atacó provocándole numerosas heridas punzantes.

Agente de los Mossos d'Esquadra con un detenido en Barcelona / EFE

El ministerio público considera que el ataque a la víctima en la zona cervical le provocó "lesiones en vasos sanguíneos que comportaron irremediablemente su muerte por shock hipovolémico".



Aitor acuchilló a la víctima, según la Fiscalía, "de forma sorpresiva e inapropiada, armado y por la espalda, de manera que esta no pudo prever el ataque ni oponer defensa eficaz alguna".

CADÁVER EN EL PRAT

El acusado fue detenido el 7 de mayo de 2019 y se encuentra en prisión provisional desde el 9 del mismo mes. No sería hasta el 21 de mayo de 2019 que operarios de limpieza encontraron el cadáver de la víctima, enterrado en un descampado situado en El Prat de Llobregat. La víctima tenía en el momento de la muerte dos hijos menores de edad, que convivían con la fallecida, de la que dependían económica y emocionalmente.