Los empleados del centro de Amazon en el muncipio catalán de Martorelles podrían quedarse en la calle. El gigante logístico ha anunciado el cierre de la planta y, según los sindicatos, el traslado de empleados podría afectar a unas mil personas, cifra que la empresa baja hasta 800.
No obstante, CC.OO ha estallado contra el cierre de la fábrica y la ha acusado de hacer un ERE encubierto. Y es que aseguran que la empresa propondrá a los trabajadores que se trasladen a las plantas de Zaragoza, que abrirá próximamente, y Far d'Empordà (Girona). Previsiblemente, eso desencadenará una oleada de dimisiones que evitarían que la empresa tuviera que pagar las indemnizaciones de un ERE.
"El traslado no se enmarca en la política de despidos que ha anunciado recientemente la empresa, ni tampoco obedece a las causas organizativas que ha aducido la dirección, sino a la voluntad de forzar a los trabajadores y trabajadoras a acogerse a convenios de referencia menos ventajosos o a darse de baja voluntariamente del puesto de trabajo para abaratar los costes de la empresa, tanto económicos como reputacionales", ha denunciado el sindicato en un comunicado.
La organización también ha lamentado el número de puestos de trabajo indirectos que pueden verse afectados por el traslado y destaca "las inversiones que desde el territorio se han hecho para facilitar el establecimiento del centro de Martorelles, así como las facilidades que las diversas administraciones han puesto a este gigante para establecerse en un punto que en su día se consideró estratégico para la distribución de mercancías".
Centro logístico de Amazon en Barcelona en una imagen de archivo
Finalmente, CCOO apunta que el de Amazon es "un modelo extractivo que no aporta valor al territorio sino que usa intensivamente sus recursos durante un periodo muy limitado de tiempo y sin voluntad de arraigo".