El conseller de Educació de la Generalitat, Josep Gonzàlez-Cambray, insiste en que el instituto "no detectó" bullying en el caso de Sallent. Lo ha dicho en una rueda de prensa este viernes, 24 de febrero, para presentar los detalles sobre la oferta de educación obligatoria para el próximo curso, en la que también ha lamentado la muerte de la joven y el estado grave de su hermana.
La consellería de Educació, que en un primer momento descartó el acoso escolar como causa del suicidio, dio ayer marcha atrás y reconoció que todas las hipótesis siguen abiertas. Por ello, ha activado la Unidad de apoyo al alumnado en situación de violencia (Usav) que actuará en coordinación con los profesionales de Bienestar Emocional; así como también se ha puesto en funcionamiento el Equipo de Asesoramiento y Orientación Psicopedagógico (EAP) y el Programa de Bienestar Emocional, para acompañar en el duelo.
Cambray ha asegurado que con la activación de la Usav se pretende "recoger toda la información sobre lo que ha podido pasar", en paralelo a la investigación que están llevando a cabo los Mossos d'Esquadra, y ha vuelto a recordar que no descartan ninguna hipótesis.
EQUIPO DEL CENTRO
Preguntado por si desde el equipo de orientación y psicológico del centro no se detectó ninguna situación de acoso escolar que llevara a este suceso, Cambray ha señalado que el acompañamiento que se hacía a las gemelas es el mismo que se hace con otros jóvenes.
El conseller ha lamentado que "cuando hay un suicido es un fracaso de toda la sociedad, y en este caso desgraciadamente son jóvenes".
CAUSAS MULTIFACTORIALES
Los Mossos d'Esquadra apuntan a que el suicidio se pudo deber a causas multifactoriales, entre ellas problemas por la identidad de género y el acoso escolar.
La policía catalana ha remitido hoy al juzgado de Manresa su primer atestado sobre este caso, en el que subrayan que todos los indicios apuntan a que se trató de un suicidio, pero todavía no detallan las causas concretas.
IDENTIDAD DE GÉNERO
El cuerpo también apunta a los problemas vinculados a la identidad de género de la fallecida, que había pedido a su entorno que la llamaran Iván. De hecho, el Observatorio contra la Homofobia de Catalunya (OCH) ha calificado de "asesinato social" la muerte de la menor.
Según fuentes cercanas, todo apunta a que fue la hermana que se hacía llamar Iván la que tomó la iniciativa para acabar con su vida saltado por el balcón desde un tercer piso, mientras que su hermana, que permanece herida grave en el hospital, saltó como muestra de solidaridad.