Los agentes de la Policía Nacional han detenido en Esplugues de Llobregat a un hombre de 24 años que tenía secuestrada y maltrataba de manera habitual y sistemática a su pareja, una chica de 18 años.
La investigación se inició tras la recepción de una denuncia anónima en la que una persona tenía a su novia encerrada bajo llave, manteniéndola así privada de libertad mediante violencia e intimidación. Esta privación de libertad llegaba hasta el punto de no permitirle utilizar sin consentimiento ni su propio móvil.
Además de las constantes amenazas sufridas, tanto a ella como a su familia, el detenido la agredía habitualmente llegando en una ocasión a rociarle la cara y el cuello con alcohol para después prenderle la zona con un mechero. Durante su cautiverio, además de sufrir frecuentes abusos sexuales, era castigada a dormir en el suelo, maniatada de manos y pies.
LESIONES MUY GRAVES
A partir de esa información, abrieron una investigación para saber la ubicación exacta de la víctima y poder así liberarla lo antes posible. Con esos datos, también se pudo localizar el domicilio del agresor. El pasado día 19 de abril, se localizó a la víctima saliendo de su residencia habitual, junto a su agresor, al que se detuvo inmediatamente. La víctima tenía lesiones muy graves y necesitó atención hospitalaria.
En el momento de ser interceptado, el agresor tenía en su poder el teléfono móvil de la mujer, bloqueando así cualquier posibilidad de pedir ayuda por su parte. Factor este que sintoniza con el total y absoluto control, para evitar de manera cualquier posibilidad de pedir ayuda.
ENCERRADA EN SU HABITACIÓN
La víctima no tenía las llaves de su casa y estaba casi todo el tiempo encerrada en su habitación. Tenía que pedir permiso a su agresor incluso para salir de su habitación o ir al baño.
El pasado 21 de abril el arrestado pasó a disposición del Juzgado de Violencia sobre la mujer en funciones de guardia de Esplugues de Llobregat, quien decretó su ingreso en prisión provisional sin fianza.