El homicidio de E.P. la noche de este jueves, 25 de mayo, en el Serie1 Bar de la avenida Marquès de Mont-Roig en Badalona ha puesto de luto a su entorno más cercano. El hombre, de unos 40 años y de origen dominicano, se encontraba en el interior del local junto con su nuera cuando recibió, de repente, varios disparos que le quitaron la vida. El pistolero abrió fuego desde una motocicleta que paró momentáneamente en la calle, una de las arterias principales del municipio, tapado con un casco negro y guantes para asestar los balazos. E.P. falleció tras recibir los disparos y sin que ningún vecino o testigo pudiese hacer nada para salvarle la vida antes de que las dotaciones del Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) llegaran. Y no fue la única víctima: su nuera fue trasladada al hospital y su pronóstico es grave.

Los amigos y familiares del fallecido han mostrado a través de las redes su condena por los hechos. Varios de ellos ya se congregaron la madrugada de este viernes a las puertas del bar, poco después del tiroteo, que tal y como ha podido saber Metrópoli, cuenta con varias actas levantadas por la Guardia Urbana por diversas infracciones: el local contaba con una planta baja donde se realizaban fiestas sin ninguna medida de seguridad y sin licencia

LOCAL CONFLICTIVO

Según algunos testigos, E.P. era el marido de la propietaria del local, que en el momento del homicidio estaba de viaje en Venezuela. Las mismas fuentes, sin embargo, han confirmado las molestias y el fuerte ruido que el bar, frecuentado normalmente por personas latinoamericanas, generaba a altas horas de la noche. "Se bajaba por unas escaleras a una especie de salón donde se hacían fiestas. No había licencia y no tenía ninguna medida de seguridad", han relatado.

Fuentes municipales han confirmado que el local contaba con una licencia de bar-cocina, pero para realizar la actividad que se desarrollaba en su interior era necesrio un permiso de bar musical que no se solicitó.

HOMICIDA HUIDO

El Área de Investigación Criminal (AIC) de los Mossos d'Esquadra trabaja para descubrir el móvil del crimen y, sobre todo, para localizar al autor del homicidio, que huyó instantes después de asestar los mortales disparos. La principal hipótesis, aunque no está clara, que se baraja por el modus operandi es que el móvil del crimen sea un ajuste de cuentas por drogas.

Tal y como avanzó Metrópoli, momentos después del suceso, la policía sometió a la conocida "prueba de la pólvora" a un posible sospechoso que localizaron a punto de subirse a un autobús nocturno en dirección a Tiana. Sin embargo, la implicación del hombre quedó descartada.

Noticias relacionadas