El Prat de Llobregat pierde un chiringuito a cuatro días de su apertura

El Prat de Llobregat encara la temporada de baño con dos chiringuitos, lejos de los tres que a finales de mayo el Ayuntamiento prometió. La pérdida del tercer establecimiento se debe a la renuncia de la licitación por parte de una de las empresas ganadoras a cuatro días de su apertura, el 24 de junio. Ante este contratiempo, el consistorio pratense declaró desierta su concesión. Los vecinos se han mostrado indignados por la pérdida, que afecta la temporada de este año y del que viene. Un detrimento que se lleva arrastrando desde 2021, cuando la playa de El Prat tenía cuatro chiringuitos.

PRÁCTICAS COLUSORIAS

La adjudicación de nuevos chiringuitos en la playa de El Prat de Llobregat ha significado un cambio en el paisaje. El mítico local de El Calamar se despedía hace unos meses después de 19 años de servicio en este municipio costero del Baix Llobregat, lamentando el "cese forzado de su actividad". Una noticia inesperada que despertó la indignación de los pratenses, al tratarse de un establecimiento histórico que ya formaba parte de la identidad de la playa.

Pero no ha significado un cambio solo por la pérdida de El Calamar. La playa, además, pasa de tener tres chiringuitos a abrir tan solo dos. Toda una sorpresa tanto para sus vecinos como para las empresas que se presentaron para conseguir una de las tres plazas puestas en concurso para la temporada 2023-2024. Fuentes del Ayuntamiento de El Prat hacen referencia a prácticas colusorias en el proceso de licitación del 'Chiringuito 2'. El concurso lo ganó la empresa de Castelldefels The Flying Dogs con 39,25 puntos. El 6 de junio se notificó a los ganadores el requerimiento de presentar toda la documentación necesaria para cerrar la adjudicación, siendo el término de finalización el 20 de junio. Ese mismo día la empresa notificó al consistorio su renuncia.

Dos semanas después, The Flying Dogs presentó una instancia al Ayuntamiento para informar de la imposibilidad de presentar, por su parte, toda la documentación requerida para la concesión de los chiringuitos. En el escrito, la empresa de Castelldefels hizo referencia al "poco tiempo hábil para poder poner en marcha el proyecto, así como para confeccionar la plantilla de personal a estas alturas del verano".

Como consecuencia, la Mesa propuso declarar desierta la licitación del 'Chiringuito 2' de la concesión administrativa de los establecimientos de la playa de El Prat, tanto para la temporada de este año como para la del 2024. Con lo que el año que viene el municipio también tendrá solamente dos chiringuitos. 

FALTA DE PREVISIÓN

El chiringuito El Calamar explicó a Metrópoli cuando se conoció su cierre que el Ayuntamiento les había anulado los dos años de prórroga que les quedaban, claves para recuperar la inversión que hicieron en 2019 cuando ganaron el concurso. Desde el gobierno municipal puntualizaron a este medio que el proceso seguido fue totalmente legal, y que la nulidad de la prórroga se hizo coincidiendo con el fin del contrato de los otros dos chiringuitos, para sacar a concurso los tres al mismo tiempo. Una estrategia que, parece, no ha funcionado como lo esperado. 

Aunque desde el consistorio comentan a este medio que los dos chiringuitos de esta temporada, que han entrado en funcionamiento a partir del 24 de junio, han tenido una buena acogida, los vecinos de El Prat lamentan a este medio la reducción de la oferta por "la falta de previsión del consistorio". Además, apuntan a "un deterioro de la oferta", en contraste con las promesas del consistorio de aumentar la calidad. 

Las dos empresas que actualmente tienen chiringuitos en la playa de El Prat son de Castelldefels: el grupo Iguana y Colasan Family SL, esta última es quien ocupa la antigua terraza de El Calamar bajo el nombre Lobo de Mar. Ambas regentan chiringuitos en otros municipios de Catalunya, como Sitges, Gavà o el mismo Castelldefels. En El Prat ofrecerán su servicio hasta el cierre de la temporada de baño, establecida el 12 de octubre. 

CASTELLDEFELS ARRASA EN EL PRAT

Este 2023 el municipio pratense ha renovado por completo la flota de tres chiringuitos con los que había contado hasta ahora. Unas concesiones que se otorgan por dos años con la posibilidad de prorrogarlos por un par más. Según los datos que se reflejan en el Perfil del Contratante, la concesión conocida como 'Chiringuito 1' —que hasta ahora ocupaba El Calamar— fue ganada por la empresa de Castelldefels Colasan Family SL, que ha abierto una caseta bajo el nombre Lobo de Mar. En este caso, obtuvieron una mejor puntuación que los anteriores propietarios: 40,85 puntos contra los 39,75 de El Calamar. Colasan Family SL también cuenta con otro chiringuito en las Tiendas de Sitges.

Por otro lado, la concesión del 'Chiringuito 3' —el más cercano al Centro Municipal de Vela— continúa en manos del grupo Iguana desde hace seis años (los únicos que han mantenido su chiringuito), pero esta vez bajo el nombre 'Deseo Beach'. Su propuesta obtuvo una puntuación de 38,75. Esta empresa familiar de Castelldefels gestiona otros chiringuitos en Sitges, Gavà y Castelldefels, donde también tiene dos restaurantes: uno en el Canal Olímpico y otro en el pabellón de Can Roca. 

El 'Chiringuito 2', declarado desierto, estaba ocupado por el Duna, que tras 10 años sirviendo en la playa de El Prat se ha despedido de la que se había convertido en su casa compartiendo estas líneas a través de sus redes sociales: "A todas y todos los que nos preguntáis insistentemente cuándo abrimos, sentimos deciros que, por diversas razones difíciles de explicar y de entender, el Duna no abrirá este verano en la playa de El Prat".