El Baix Llobregat, epicentro del virus del Nilo en Catalunya

El pasado mes de septiembre se notificó la primera persona infectada por el virus del Nilo Occidental (VNO) en el área de Barcelona. Una mujer de 76 años, vecina del Prat de Llobregat, ingresó en el hospital de Bellvitge por esta enfermedad que se transmite mediante la picadura de mosquitos infectados. Ello hizo saltar las alarmas sobre la posible extensión de un virus que puede desarrollar una enfermedad grave en algunos contagiados.

La infección de esta residente no fue casual, ni responde a un contagio en otro territorio. Escasos días antes de esta hospitalización, se detectaron anticuerpos en dos caballos de esta localidad, lo que resulta un indicador de que el virus está circulando a través de mosquitos vectores en la zona.

Al margen de estos casos del Prat, se han detectado diversos contagios en animales repartidos por varios puntos del Baix Llobregat durante los últimos dos meses, lo que ha convertido a esta comarca en el epicentro de este virus en Catalunya. Desde el primer contagio en animales, detectado el pasado 14 de agosto, se han registrado ocho casos más en municipios de esta comarca, lo que pone en evidencia la presencia del VNO en mosquitos de la zona.

Caballos en el Delta del Llobregat / BAIX LLOBREGAT TURISME

INFECCIONES

El Laboratorio Central de Veterinaria de Algete, dependiente del Ministerio de Agricultura, detectó anticuerpos en un caballo de Viladecans el pasado 18 de agosto que indicaban que su contagio se había producido recientemente. Tan solo cuatro días antes se detectó el mismo virus en una gaviota con sintomatología clínica en Cornellà de Llobregat.

Este laboratorio ubicado en Madrid confirmó otros dos casos en caballos el pasado 24 de agosto en el Prat. El 19 de septiembre, se registraron otros tres casos más en équidos en el municipio de Viladecans, a los que se añadieron los últimos dos caballos detectados en la misma ciudad el día 28 del mismo mes. En menos de dos meses, la comarca ha sumado nueve infecciones confirmadas en animales.

La Generalitat señala que la Fiebre del Nilo Occidental se transmite mediante la picadura de mosquitos que previamente han picado a aves infectadas, por lo que los équidos y los humanos no pueden transmitir el virus a estos insectos tras una picadura. Respecto a la gravedad del VNO en humanos, el epidemiólogo Antoni Trilla recordó que en el 80% de los casos la enfermedad resulta asintomática, en un 20% cursa un cuadro febril con síntomas leves y en menos del 1% de infecciones se desarrolla una enfermedad grave.

Fauna en el Delta del Llobregat / GENCAT

REFUERZO DEL CONTROL

A raíz de los casos detectados en animales, el servicio de Control de Mosquitos del Consell Comarcal del Baix Llobregat está llevando a cabo acciones de control, así como las inspecciones entomológicas previstas en el Protocolo de Vigilancia y Control de las Arbovirosis de la Generalitat, al mismo tiempo que ha reforzado las medidas para mantener la población de mosquitos al nivel más bajo posible, estos últimos unos trabajos que se realizan desde 1983.

Como explica Carles Aranda, coordinador de este servicio, al seguimiento de la población de mosquitos se suma la captura de estos insectos, que posteriormente se envían a analizar al IRTA-CReSA para conocer si están infectados. Hasta la fecha, no se ha detectado ningún ejemplar con VNO. Además, recuerda que algunas especies pueden transmitir enfermedades como el Dengue y el Zika, por lo que destaca la importancia de realizar inspecciones para evitar la transmisión autóctona del estos virus.

Los tratamientos larvicidas para el control de la población de estos insectos se llevan a cabo durante una temporada que, aproximadamente, comprende desde finales de febrero hasta noviembre, y se realiza un especial seguimiento en lugares donde se produce una mayor concentración de personas, como zonas escolares y ambulatorios. En espacios urbanos, también se presta especial atención a los imbornales, que en toda la comarca rondan los 70.000, al tratarse de puntos de acumulación de agua. Respecto a los terrenos rurales, la localización en la que se detecta una mayor cría de estos insectos es el Remolar, en el Delta del Llobregat.

VIGILADO DESDE 2004

En 2004 se detectó el primer caso humano de Fiebre del Nilo Occidental en España en un paciente de Barcelona cuyo contagio se produjo en la provincia de Badajoz. Desde ese año, se puso en marcha el Programa de Vigilancia de la Fiebre del Nilo Occidental en Catalunya, en el que trabajan de forma conjunta el Servicio de Prevención en Salud Animal y el Servicio de Fauna y Flora del Departamento de Acción Climática, el IRTA-CReSA, los Agentes Rurales y la Agencia de Salud Pública de Catalunya. Con esta iniciativa se vigilan los nuevos focos del virus a raíz de los contagios detectados en animales.

Durante años, la presencia del virus en Catalunya fue prácticamente nula. Según datos del Departamento de Acción Climática de la Generalitat, esta tendencia cambió en 2017, al detectar por primera vez en la comunidad catalana la infección de un ave silvestre en la provincia de Lleida. Un año más tarde se detectó en un caballo, en Vilanova i la Geltrú, mientras que en 2020 se registró una decena de focos repartidos por Tarragona y Lleida. Las mismas provincias contaron con diversos casos en animales durante los dos años posteriores.