Un Policía Nacional, el cortafuegos entre la Guardia Urbana y el Ayuntamiento de Badalona
El consistorio ha fichado a Juanjo García, oficial de CNP con más de 30 años de servicio a sus espaldas, como coordinador para equilibrar las relaciones entre el gobierno municipal y el cuerpo de policía local
23 febrero, 2024 23:20Noticias relacionadas
Los conflictos constantes entre los agentes y los mandos que forman la plantilla de la Guardia Urbana de Badalona y el ayuntamiento parecen llegar a un “alto al fuego”. El alcalde, Xavier García Albiol, ha decidido ondear la bandera blanca y ha depositado su confianza en una figura que llega al cuerpo local dispuesta a mediar entre la policía y el consistorio: la de Juanjo García, un oficial del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) procedente de Mataró que ya forma parte de las filas municipales como coordinador.
El fichaje pinta prometedor, o eso es lo que piensa el PP. También comparten la idea los sindicatos policiales, que son los principales protagonistas de los desencuentros que han llevado al cuerpo de policía a estar en el punto de mira de la actualidad desde hace años. Las demandas de unos son motivo de enfado para los otros y la evidente mala relación de una parte de la plantilla con los jefes no permite crear un ambiente laboral adecuado para los poco más de 200 agentes, hastiados y con más ganas de irse a otras policías que de hacer carrera en Badalona.
Plena confianza
Si de algo está seguro el equipo de Albiol es que confiar en Juanjo García es un completo acierto. Las fuentes municipales consultadas por Metrópoli aseguran que García cuenta con un "amplio currículum" en el mundo de la seguridad ciudadana. Un plus: es vecino del municipio. No se trataría, por tanto, de un recién llegado. Y es que no cualquiera se atrevería a acarrear a sus espaldas una guerra que viene de hace años.
Que los mandos de la urbana han sido históricamente afines al PSC, es vox populi. Hay quienes dicen, de hecho, que el sindicato SIP-FEPOL, conocido internamente como el "sindicato de los jefes", y los socialistas van de la mano. Fue esta sección la que, de hecho, denunció al ahora alcalde por el famoso "caso antenas" y fue el mismo Albiol el que condenó a un ostracismo temporal al superintendente Conrado Fernández, a punto de jubilarse. Tras el mandato socialista de Jordi Serra, el del PP envió a Fernández al Departament d'Interior de la Generalitat. Una manera de "quitárselo de encima", declararon en su día a este medio diversas fuentes policiales que vivieron esa época.
No es de extrañar que el gobierno municipal actual haya decidido buscar ayuda externa para apaciguar las aguas entre la problemática Guardia Urbana y la concejalía de Seguridad que tiene al frente a Juan Manuel Ruiz.
Un trabajo de mediación
Las cuatro paredes de la maltrecha comisaría de Turó d'en Caritg han presenciado demasiadas escenas y ningún alcalde o alcaldesa ha sido capaz de imponer la paz entre los agentes del cuerpo local, tan divididos y enfrentados desde hace tiempo. Metrópoli se ha hecho eco de multitud de enfrentamientos entre los sindicatos mayoritarios de la Guardia Urbana: la Plataforma Sindical Unitaria (PSU) y el SIP-FEPOL. Peleas que muchas veces apuntan hacia los mandos: desde "enchufismo" laboral en unidades "privilegiadas" por parte de los superiores hasta una "persecución" a una parte de la plantilla con expedientes disciplinarios incluidos por parte del intendente Valentín Anadón. Asimismo, la PSU también denunció un presunto cobro irregular de horas extra del superintendente Conrado Fernández que Fiscalía archivó hace unos meses.
Ni las prolíferas reuniones entre unos y otros han logrado establecer una hoja de ruta a seguir para mejorar las condiciones laborales y salariales de los agentes, que arrastran problemas que no se cortan en anunciar a través de sus perfiles de Twitter.
Juanjo García, oficial de CNP
Ante la falta de entendimiento entre los agentes, los mandos y el consistorio, el gobierno del PP parece haber encontrado la ayuda que buscaba en Juanjo García.
García es Jefe de equipo operativo con 35 años efectivos de servicio. Lo explican a este medio fuentes municipales: el oficial prestó servicio en Badalona desde el 1991 hasta 2012, cuando se trasladó a Mataró, donde estuvo destinado hasta 2016, fecha en la que solicitó su pase a segunda actividad. La mayor parte de sus años de servicio los desempeñó en Policía Judicial, además de Extranjería y otros servicios como los conocidos radiopatrullas de la Policía Nacional, los "Zeta".
Condecorado y felicitado
El nuevo coordinador ha sido condecorado en dos ocasiones con la Cruz al Mérito Policial con distintivo blanco y acumula numerosas felicitaciones públicas y privadas. García también ha realizado diversos cursos dirigidos a la actividad policial, entre ellos: prevención de riesgos laborales, técnicas de identificación de falsificaciones, primer curso de especialización en Policía Judicial para CNP, plan de Prevención y Protección antiterrorista, identificación lofoscópica, detección de documentos falsos de viaje y extranjería operativa.
El policía reside en Badalona desde el 1998 y el gobierno municipal asegura que "tendrá funciones de coordinación entre la concejalía de Seguridad y la Guardia Urbana, así como también en materia de seguridad ciudadana y protección civil".
Presentado a los sindicatos
Según ha podido saber Metrópoli, el consistorio ya se ha encargado de realizar las presentaciones pertinentes entre las secciones sindicales y García. El policía, además, se ha dejado ver en acontecimientos importantes de ciudad como el derrumbe del pasado 6 de febrero en el que murieron tres personas en El Raval.
Todo apunta a que las cosas en Guardia Urbana cambiarán: la jubilación del superintendente, el único de toda Catalunya, se acerca. Está por ver quién tomará las riendas del cuerpo.
Albiol también se encargó hace unos días de recordarle al sindicato PSU la reforma de 1,5 millones de euros que transformará la comisaría de Turó d'en Caritg. Aún así, esto no parece ser suficiente para la parte de la plantilla que protagonizó durante todo el 2023 numerosas protestas a las puertas del antiguo ayuntamiento, en la plaza de la Vila.