Marcos Sánchez, concejal del PP de Esplugues de Llobregat, ha dimitido de sus cargos en el partido tras el escándalo de las facturas, según confirman fuentes internas a Metrópoli. El regidor del Ayuntamiento se encuentra bajo sospecha por gastar casi 61.000 euros del partido en asuntos personales, entre los que figuran una sillita de bebé para el coche, un libro de Peppa Pig, globos, confeti, vinos y quesos, entre otros.
Concretamente, Sánchez ha renunciado a la presidencia del partido en Esplugues y a la vicesecretaría que ostentaba en el PP de Catalunya. En el hipotético caso de que dimitiera como concejal, debería hacerlo en el pleno municipal del próximo 15 de mayo. Además, deberá decidir si deja el acta de concejal o continúa como regidor no adscrito.
En conversación con este medio, Sánchez ha evitado confirmar o desmentir su continuidad como concejal del PP en el Ayuntamiento de Esplugues.
Denuncia ante los Mossos
En un comunicado publicado en sus redes sociales, el concejal asegura que ha interpuesto una denuncia ante los Mossos d'Esquadra por la filtración de los documentos. “He puesto en conocimiento de la policía unos hechos que, a mi juicio y por su gravedad, pudieran contravenir las obligaciones previstas por la normativa vigente reguladora en materia de custodia documental, entre otros”, detalla el comunicado. “Lamento profundamente que no haya sido el propio Ayuntamiento de Esplugues (como interesado) la parte actora en este procedimiento”, añade.
Marcos Sánchez, concejal del PP del Ayuntamiento de Esplugues de Llobregat
En la misma publicación, Sánchez defiende que “no solo hemos cumplido con lo previsto en el Código de Buen Gobierno del Ayuntamiento de Esplugues en lo relativo a las asignaciones de los Grupos Municipales, sino que hemos instado a los correspondientes órganos colegiados (tal y como se podrá acreditar en las actas de los mismos) a la fiscalización y control de las mismas”.
Mecanismos de control
El Ayuntamiento de Esplugues tiene establecidos mecanismos de control financiero independientes para garantizar que los gastos justificados se ajusten a la legalidad. Por su parte, los grupos municipales están obligados a justificar los gastos vinculados al funcionamiento ordinario del grupo municipal.
En el caso de determinar un intento sistemático del grupo municipal del PP para justificar gastos fuera de normativa, se estudiarán las medidas legales adecuadas, así como el refuerzo, si se tercia, de los mecanismos de control.