Iker, el campeón de boxeo de Catalunya en amateur

Iker, el campeón de boxeo de Catalunya en amateur

Gran Barcelona

Iker, de adolescente con sobrepeso a ser campeón de Catalunya de boxeo desde Cornellà

El joven llegó a pesar casi 100 kilos con tan solo 15 años: decidió cambiar su estilo de vida y logró adelgazar 30 kilos en siete meses entrenando en el Gym Boxing Saus

24 mayo, 2024 23:30

Iker era un niño gordo. Recuerda perfectamente la desoladora sensación que lo embargaba cuando se acercaba el verano. No quería ir a la playa con sus amigos ni quitarse la camiseta: era un adolescente de 15 años que pesaba 92 kilos: "Ya te puedes imaginar, midiendo 1,65 metros", cuenta el chico a Metrópoli.

El protagonista de la historia tiene hoy 19 años y habla ante las cámaras en mitad de un ring de boxeo, el del Gym Boxing Saus de Cornellà de Llobregat. En este lugar el joven decidió cambiar su vida de la mano de su padre, Juanma Serrato, el propietario desde hace ocho años del gimnasio.

Iker, en el medio con 15 años, y dos compañeros más

Iker, en el medio con 15 años, y dos compañeros más CEDIDA

"Me harté de los comentarios"

El chico empezó a "estar gordito", como él mismo lo define, con ocho años. "Siempre he tenido sobrepeso", reconoce. El deporte que practicaba no daba los resultados deseados: Iker combinaba el boxeo, que comenzó con 14 años, con el fútbol, pero no le daba resultados. Hasta que su cabeza hizo click.

A pesar de que el peleador niega haber recibido bullying por parte de sus compañeros, sí era víctima de ciertos comentarios, especialmente de su grupo de amigos: "Siempre estaba el típico comentario del gordito. Un día dije: ya no habrán más comentarios. Me harté".

Un boxeador en el gimnasio Gym Boxing Saus de Cornellà

Un boxeador en el gimnasio Gym Boxing Saus de Cornellà GALA ESPÍN Cornellà

Ir a la playa, imposible

Su mayor complejo, lo que más le atormentaba, era su pecho. Y por eso odiaba ir a la playa en verano: detestaba el momento de tener que quitarse la camiseta. Por ello, decidió entrenar más que antes: "Ya lo hacía antes, pero a partir de ahí me lo tomé más en serio. Entrenaba de lunes a sábado tres o cuatro veces. Daba el 100% de mí", recuerda Iker.

Además de las sesiones de físico y fuerza, el joven también salía a correr: "Igual me iba los domingos a correr dos horas, pero con mi peso tampoco podía hacerlo grandes distancias". Aunque fueran cuatro kilómetros. Un primer esfuerzo que lo hizo perder en un mes unos siete kilos. Siete meses después, se había quitado 32.

Iker en su adolescencia

Iker en su adolescencia ÒSCAR GIL

"El Iker de 15 años estaría orgulloso"

Ahora, Iker Serrato es campeón de Catalunya de boxeo amateur desde octubre del año pasado. "El Iker de 15 años estaría orgulloso de mí", asegura. Y no es cuestión de talento: "No soy el más talentoso. Es esfuerzo y constancia, mentalizarse".

Agradece seguir por el buen camino: "Tengo colegas que están perdidos con los porros y la fiesta". Aunque alguna celebración siempre cae, especialmente después de un triunfo como un campeonato. "Quiero seguir sumando".