Protesta vecinal en Sant Adrià de Besòs. Un grupo de vecinos ha decidido organizarse y alzar la voz contra la inseguridad, el incivismo y la suciedad que, según ellos, se palpa en el municipio desde hace años.
Tal y como estos residentes del Casc Antic detallan a Metrópoli, este viernes se manifestarán a las puertas del ayuntamiento, en la plaza de la Vila, coincidiendo con el inicio de la Fiesta Mayor: "Queremos hacernos oir porque la ciudad está deprimida".
Patrullas vecinales
No portarán pitos ni tampoco han preparado grandes pancartas. Será un acto "muy cívico", explican desde el grueso del grupo. Un conjunto de personas que ya en su día fueron pioneros en crear patrullas vecinales para controlar la zona y protegerse los unos a los otros: "Hay muchos intentos de okupación y por las noches muy pocos efectivos policiales porque están todos al otro lado del puente", denuncian.
Y es que todavía hoy el Casc Antic cuenta con la abandonada fábrica de cartón y multitud de locales vacíos que llaman la atención de okupas y delincuentes. No sería la primera vez que estas patrullas evitan una desgracia mayor. De hecho, todavía continúan con la voluntaria tarea actualmente: "También nos avisamos de si alguno de nosotros se ha dejado la ventanilla del coche bajada o si vemos a alguien con actitud sospechosa".
Inseguridad
De este mismo núcleo sale la iniciativa que congregará a decenas de vecinos a las puertas del consistorio este viernes. Será a partir de las 18:30 horas, momentos antes del pregón inaugural de Fiesta Mayor, y la intención es "hacerse oir": "La ciudad está hecha una mierda y no sabemos si esta dejadez se ha contagiado al gobierno municipal o es que directamente no dan abasto con todo lo que hay". Enumeran: "Sin playa, sin piscina, los parques infantiles destrozados, sin ocio".
Los vecinos añaden también el último episodio violento vivido muy cerca de sus calles: el del hombre apuñalado en el cuello en la carretera de Santa Coloma, límite con el municipio que lleva su nombre y Badalona. "Salimos con miedo de casa y lo que más tememos es que nos okupen los pisos", denuncian.
"Nos queremos ir de aquí"
"Cada vez se van más y los que nos quedamos es porque no tenemos medios para irnos". Un descontento generalizado entre este grupo de residentes, hartos del Sant Adrià en el que viven ahora: "No queremos que nuestros hijos crezcan aquí". Unas declaraciones que ni ellos mismos podían creerse que dirían algún día, después de vivir y criarse en la ciudad. "Ves que las tiendas de toda la vida cierran y cada vez queda menos. Ni ocio noturno hay, aunque eso siempre ha sido así", comentan.
Otro de los motivos que los lleva a movilizarse es la suciedad, algo que achacan al incivismo de las personas: "Por mucho que los efectivos de limpieza trabajen, la gente es muy marrana. La calle de las Monges está llena de mierdas de perro".
Sin un partido político detrás
Los vecinos han colgado carteles por las calles y difundido la protesta a través de las redes sociales. Pretenden que más adrianenses se sumen a la causa y aseguran que ningún partido político se ha puesto en contacto con ellos, como se venía rumoreando.