Se consideran la periferia. Y se sienten abandonados. Más bien, poco escuchados --o nada, directamente--.
Hace años que los vecinos de Pomar, en Badalona, esperan milagros. Proyectos que se materialicen y den una nueva vida al barrio. Y ninguno llega. No son los únicos que sufren el hartazgo por unos cambios que todavía no han visto, pero sí tienen una carga añadida: la mala relación, explican a Metrópoli, con el gobierno municipal de Xavier García Albiol.
Una "mala fama" erradicada
El conjunto de afectados --los que han tenido más tiempo-- se reúne con este medio en el local de la Asociación de Vecinos. Como suele pasar en estas situaciones, la mayoría no son jóvenes. Pero recuerdan. Y comparan épocas: "Cuando el barrio se creó, en el 1967, nadie quería venir a vivir aquí por la mala fama que tenía", explican. Una situación que se ha revertido por completo. Y no gracias a la ayuda municipal, apuntan.
"Este barrio se ha limpiado solo", expresan con orgullo los más veteranos. "Nosotros hemos conseguido que cambie. Ahora no te asalta nadie, no tienes problemas de convivencia". Se sienten orgullosos del antes y el después. Pero creen que merecen más por parte de la administración.
Vecinos de Pomar reunidos en el local de la Asociación
Nula relación con la asociación
Miguel Artero se alza como portavoz de unos vecinos que ya no saben cómo llamar la atención. Es el pomareño el que consigue reunir a las decenas de vecinos que ese miércoles por la tarde acuden al local. El presidente de la entidad resume los temas que generan indignación entre la población. Todos tienen una base de fondo: el nulo feedback con el PP de Albiol.
Artero está convencido de que las diferencias personales entre unos y otros han creado un abismo. Pero eso no debería afectar negativamente a los casi 5.000 habitantes de Pomar que, por cierto, contribuyeron a darle la mayoría absoluta a Albiol: "Ni él ni su equipo pueden llevar a pleno los temas que quieran y que nos afecten sin antes hablarlo con nosotros", denuncia el presidente de la asociación. "Hacen las cosas sin avisar".
El barrio de Pomar en los años 70
La polémica del parque de basuras
Los pomareños creen que Albiol les vende humo. La gota que colmó el vaso, dicen, fue cuando se enteraron del posible traslado de un parque de basuras a su zona. Concretamente, el ya ubicado en la avenida de la Cerdanya, en La Morera.
A pesar de que el equipo de Albiol ha negado varias veces que sus temores vayan a hacerse realidad, los vecinos no se fían. Primero, porque el consistorio cambió el uso del solar sin dar cuenta de ello: "De zona verde, pasó a suelo edificable", exponen los afectados.
Y segundo porque, según los residentes, la versión cambió en pocos meses: "Dani Gracia dijo en diciembre que no habrían camiones y después admitió que habría una circulación porque iría el aparcamiento". Aunque el Teniente de alcalde de Territorio y Sostenibilidad, sobre este último tema, también dijo que no afectaría al barrio de Pomar "porque los vehículos harían su entrada y salida por la zona industrial".
Vecinos de Pomar con pancartas de protesta
Afectación en Les Guixeres
La zona industrial a la que el concejal hizo referencia es el polígono de Les Guixeres. Por allí se concentrará la principal circulación de vehículos pesados, aseguró el gobierno municipal. "Pero dijeron que no nos preocupásemos, que eso no era Pomar". "¿Y qué es entonces?, se preguntan. "No saben ni lo que es Pomar".
Una polémica que parece que también ha despertado la indignación de los comercios del polígono. "Quieren unirse a la protesta porque tampoco quieren que pasen tantos camiones por delante de los negocios", explican los vecinos. Y porque quieren que la zona verde de Guixeres se respete.
Bloques del barrio de Pomar
"Iremos para explicar los proyectos"
Preguntados por la cuestión, desde el gobierno municipal reiteran que no se instalará el parque de basuras en Pomar. "Por mucho que haya una persona que insista en ello y que parece que quiera que vaya el parque allí", explica el concejal Dani Gracia. "Poco más tenemos que decir respecto a este tema".
En cuanto a la relación con la asociación de vecinos, Gracia asegura que se tendrá en cuenta a los residentes del barrio para las mejoras, ya sea en calles, en plazas o en futuros equipamientos. "Tenemos claro lo que hay que hacer y no hace mucho que fuimos. Volveremos para explicar los proyectos que se llevarán a cabo, como no puede ser de otra manera", defienden desde el gobierno.
"Más abandonados" que otros barrios
El del parque de basuras es ahora el principal problema, pero no es el único por el que estos residentes se sienten "más abandonados que otros barrios". La riera de Pomar es ya una reivindicación histórica. Y lo que tiene que ser un precioso paseo para humanos y perros sigue igual de desangelado que hace años.
Respecto a esto, hace poco más de una semana que el alcalde anunció que ya había recibido el último informe técnico de la Generalitat que faltaba para poder licitar las obras, que comenzarán en los próximos meses. "Este proyecto de ciudad va a permitir convertir la riera en un gran pulmón verde para el disfrute de los vecinos de Badalona", declaró Albiol. Palabras que no calaron en los pomareños.
Pancartas hechas por los vecinos de Pomar
"Siempre hemos sido la última mierda"
En esta especie de cuórum el enfado irradia por los poros de la piel de cada uno de los asistentes. "Siempre hemos sido la última mierda de Badalona", alerta un vecino. "Nos han metido las zonas industriales que nadie quería. También quisieron ponernos hace años las cocheras de los autobuses y aquello se paró", recuerdan otros.
Y ahora el máximo responsable es Albiol. "Hace lo que quiere con su mayoría absoluta", le recriminan los afectados, que rememoran una frase pronunciada por el mismo alcalde: "Se construirá lo que necesite Badalona, no Pomar".
Bloques del barrio de Pomar
"Solo nos han puesto papeleras y bancos"
A la práctica, lo único que los denunciantes aseguran que ha cambiado es algo del mobiliario urbano: "Nos han puesto más papeleras y bancos". Gesto que agradecen, pero que ven insuficiente. "Necesitamos que asfalten calles, que repinten las señales de tráfico del suelo, que hagan pipicans en condiciones...", enumera Artero, el portavoz vecinal. Es Pomar, de hecho, un barrio complicado a nivel viario, con numerosas señales de stops y cedas al paso que dificultan la circulación segura y generan accidentes de tráfico.
Por no hablar de esa esperada instalación deportiva que el barrio lleva pidiendo años y que el PP de Albiol asegura que ya se está estudiando.
Vecinos de Pomar con carteles de protesta
"Nos da igual quién gobierne"
A pesar de sus críticas a la gestión municipal, el grupo insiste en que si las cosas se hacen bien, les da igual quién sea el partido que gobierne. "No es que vayamos contra Albiol, vamos contra todo el que no escuche a sus vecinos", recalca Artero. "Claro que ha habido más alcaldes que no lo han hecho bien, pero al menos escuchaban", añade.
Las problemáticas en cada barrio son diferentes. En algunas son más urgentes. Los de Pomar lo saben, pero creen que ha llegado el momento de que miren por ellos. Está por ver si se produce esa visita municipal antes de que el conflicto estalle.