
Vista panorámica del monasterio de Sant Pere de Casserres
El sendero que parece un cuento de hadas perfecto para primavera: a una hora de Barcelona
El camino que rodea al monasterio no es solo una ruta de senderismo; es una experiencia sensorial. Rodeado de vegetación exuberante, árboles centenarios y flores silvestres, este sendero es un viaje a través del tiempo y la naturaleza
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En plena comarca de Osona, donde el verde de los bosques abraza la historia milenaria, se encuentra uno de los tesoros más sorprendentes de Catalunya: el entorno natural del monasterio de Sant Pere de Casserres.

Vista panorámica del monasterio de Sant Pere de Casserres
A tan solo una hora de Barcelona, este rincón se ha ganado el corazón de los senderistas y viajeros que buscan desconectar sin alejarse demasiado de la ciudad.
Una ruta que parece de otro mundo
El camino que rodea al monasterio no es solo una ruta de senderismo; es una experiencia sensorial. Rodeado de vegetación exuberante, árboles centenarios y flores silvestres, este sendero es un viaje a través del tiempo y la naturaleza.
A medida que se avanza por sus caminos, el murmullo del río Ter acompaña cada paso, mientras las montañas ofrecen un telón de fondo de postal.
Este enclave es especialmente popular en primavera y verano, cuando el paisaje alcanza su máxima expresión y las condiciones son ideales para disfrutar de una caminata entre sombras frescas y panorámicas que dejan sin aliento.
Historia entre bosques
Más allá de su belleza natural, el monasterio de Sant Pere de Casserres es una joya arquitectónica. Fundado en el siglo XI, en plena época de repoblación de la Catalunya medieval, este edificio románico conserva el encanto de otra era.
Sus muros de piedra, sus arcos robustos y el silencio solemne que lo envuelve invitan a la contemplación y a conectar con una historia que ha resistido el paso de los siglos.
Cada rincón del monasterio cuenta una historia, y su localización privilegiada lo convierte en un mirador natural desde el que contemplar el curso del río Ter y el manto de bosque que lo rodea.
Un oasis para todos los sentidos
Con su combinación de naturaleza virgen, patrimonio histórico y tranquilidad absoluta, Sant Pere de Casserres se consolida como uno de los lugares más mágicos para explorar cerca de Barcelona.

Vista panorámica del monasterio de Sant Pere de Casserres
Ya sea que busques una caminata entre paisajes de ensueño, inspiración fotográfica o un momento de paz entre muros con siglos de historia, este rincón de Osona tiene algo especial para ofrecer a cada visitante.
Cómo llegar
La accesibilidad es otro de sus grandes atractivos. Desde la estación de Sants en Barcelona, un tren de la línea R3 lleva hasta Vic.
Desde allí, un servicio de autobuses conecta con la zona del monasterio, facilitando la visita para quienes optan por el transporte público.

Un tren de Rodalies parado en una estación / RODALIES
Si se prefiere ir en coche, la carretera C-17 permite llegar en menos de una hora desde la capital catalana, haciendo de esta ruta una escapada perfecta para el fin de semana o incluso para una excursión de un solo día.