Gavà se enfrenta a "una nueva sacudida". Así lo defiende Gemma Badia, alcaldesa desde 2021, que ha querido dejar claro que la transformación no será ni cosmética ni improvisada. Será estructural.
Y empieza por el acceso a la vivienda. "La demanda es real", afirma con convicción. "La prioridad es clara: primero los vecinos de Gavà, después quienes se fueron y quieren volver, luego quienes trabajan aquí, y por último el resto".
Espacios verdes dentro del nuevo barrio Roca City entre Viladecans y Gavà
La hoja de ruta del gobierno municipal pivota sobre esta urgencia habitacional, con una batería de promociones públicas, suelos dotacionales y proyectos urbanísticos que pretenden coser los bordes de la ciudad y hacer permeables espacios antes cerrados.
"El Espai Roca, el llamado Roca City, dejará de ser una barrera. Se convertirá en un eje transitable. La Rambla y la riera de Sant Llorenç se integran, no habrá fragmentación", explica Badia. “Es un cambio de escala”.
Vivienda a varias velocidades
El Ayuntamiento ha acordado con la Generalitat la promoción de 400 viviendas de protección oficial.
A ello se suman los pisos dotacionales que ya se están impulsando junto a la comisaría de los Mossos, y el desarrollo de Roca City y Can Ribes, aún en fases iniciales.
Antiguo equipamiento Maria Aurèlia Capmany de Gavà donde se construirá vivienda dotacional
"Podríamos haber comenzado muchas obras a la vez, pero lo hemos evitado. A nadie le gusta vivir en una ciudad en obras. No buscamos el rendimiento político, sino el beneficio ciudadano", defiende Badia, que reivindica "llegar al final del mandato con proyectos sin acabar, pero bien planificados".
Esta "nueva centralidad" no solo reconfigura la movilidad interna —con viales que conectarán Ponent y Canyars con menos tráfico interior y más circunvalación—, sino que redibuja el mapa de servicios.
"Gavà debe ser una ciudad cómoda, donde no necesites moverte si no quieres, porque lo tienes todo aquí", resume la alcaldesa.
Una estación y muchas preguntas
Uno de los grandes hitos para 2027 será la nueva estación de Rodalies, ya aprobada, que se ubicará cerca de varios futuros equipamientos municipales y zonas de aparcamiento.
"La gente podrá aparcar junto a la nueva estación. Es una manera de hacer el tráfico más útil, ganamos todos. Se trata de favorecer una movilidad más eficiente y conectada con Barcelona", defiende Badia.
Proyección de la nueva estación de Renfe de Gavà / AJUNTAMENT GAVÀ
Preguntada por si esta infraestructura puede atraer turismo, la alcaldesa es tajante: "No se está hablando en absoluto de modelos turísticos. Gavà está lejos de eso".
El Ayuntamiento mantiene una línea clara: "Apostamos por un turismo sostenible, muy controlado. Tenemos limitados los apartamentos turísticos y la oferta hotelera está muy medida. No es casualidad", insiste.
Menos tráfico, más aire
Mientras avanza la estación, el Ayuntamiento pone el foco en el día a día: nuevos aparcamientos estratégicos (en Roger de Flor y junto al Cementerio), la reforma integral de la Avenida de Eramprunyà, mejora de calles como Santa Teresa y Tresols, y zonas de sombra en la Avenida del Mar.
"Queremos reducir el tráfico interno y priorizar zonas de aparcamiento útil. Es un cambio de modelo", resume Badia.
Bañistas en la playa de Gavà
La intervención en Gavà Mar busca revertir la degradación causada por el tráfico pesado, mejorar el arbolado y recuperar la calidad del espacio público. "No solo mantenemos los parques existentes, ofreceremos nuevos", señala la alcaldesa.
Deporte y cultura en obras
La red de equipamientos también se amplía. El pabellón Jacme March se ha reformado por completo (con una inversión de casi dos millones de euros), mientras en Can Torelló se plantean nuevas pistas de vóley y un equipamiento deportivo mayor aún por definir.
En Les Massotes, el objetivo es construir un nuevo pabellón en 2028. La piscina municipal de Can Horta debería estar lista en verano de 2027. “Vamos justos, no lo niego, pero confiamos en poder tirar adelante”, admite Badia.
En el Centre Cultural, el cambio llegará más despacio. “Primero hemos hecho la consulta interna. Ahora viene la parte participativa. Queremos que sea un casal vivo, donde las entidades estén muy presentes. Nos tomamos el tiempo para hacerlo bien y con sentido”, explica.
No hay cinta, hay planificación
También se avanza en la reactivación del consultorio médico de Gavà Mar y en la creación de una nueva comisaría en el barrio, dos demandas vecinales históricas.
Barrio de Gavà-Mar, en el municipio de Gavà / AJ GAVÀ
En paralelo, el consistorio ha proyectado balsas de laminación en Ponent y plantea un urbanismo pensado para evitar calles oscuras o inseguras. “Queremos abrir los espacios, evitar rincones que generen inseguridad. El urbanismo también protege”, defiende la alcaldesa.
"Viene una nueva sacudida. Lo hacemos ahora, en un momento socioeconómico complejo, porque es cuando más se necesita. La ciudad no debe rendir políticamente, debe ser habitable", concluye.