Tráfico en la AP-7 en Sant Cugat en una imagen de archivo
Un accidente obliga a cortar dos carriles en la AP-7: colas kilométricas entre Castellbisbal y Sant Cugat del Vallès
El siniestro ha provocado hasta cuatro kilómetros de retenciones, dificultando especialmente los desplazamientos en el área metropolitana
La circulación en la AP-7 vuelve a verse seriamente afectada este viernes, 14 de noviembre, a primera hora de la mañana. Un accidente ocurrido alrededor de las 5:47 horas ha obligado a cortar dos carriles en sentido sur entre Castellbisbal y Sant Cugat del Vallès, según ha informado el Servei Català de Trànsit (SCT).
El siniestro ha provocado hasta cuatro kilómetros de retenciones, dificultando especialmente los desplazamientos de entrada al área metropolitana. Los servicios de emergencia y mantenimiento trabajan en la zona para restablecer la circulación lo antes posible, aunque Trànsit recomienda utilizar rutas alternativas mientras se resuelve la incidencia.
La situación se suma a otra afectación importante en la misma vía. En Mont-roig del Camp (Tarragona), la AP-7 permanece cortada desde el jueves a las 20 horas debido a las tareas de retirada de carga que quedó dispersa sobre la calzada. Las labores continúan y no se ha precisado aún cuándo se reabrirá completamente el tramo.
Archivo - Tráfico en la AP-7 en una imagen de archivo
Otras retenciones
La mañana también está dejando importantes retenciones en varios ejes clave del área metropolitana de Barcelona. La A-2 registra uno de los tramos más complicados, con ocho kilómetros afectados entre Sant Joan Despí y Pallejà en sentido Barcelona, donde la circulación avanza muy lentamente. En la B-23, los problemas se multiplican: se acumulan cinco kilómetros de retenciones entre Barcelona y Sant Joan Despí, y otros seis entre Sant Feliu de Llobregat y el Papiol, ambos en dirección a la capital catalana.
La B-10 y la B-20, dos de las rondas más transitadas, concentran también fuertes dificultades. En la B-10 hay hasta tres kilómetros de retenciones entre Santa Coloma de Gramenet y Sant Adrià de Besòs, y otros seis en sentido sur, desde Barcelona hasta Sant Adrià.
En la B-20, la congestión se extiende en varios tramos, con hasta 6,5 kilómetros afectados entre Barcelona y Santa Coloma de Gramenet, además de circulación lenta en los accesos al Nus del Llobregat y al Nus de la Trinitat. También la C-32 presenta problemas en dos puntos —Sant Boi a Gavà y Esplugues a Cornellà— con cuatro kilómetros de retenciones en cada tramo, mientras que la C-58 mantiene los habituales embotellamientos a la entrada de Barcelona.
