Decenas de vecinos de seis barrios del distrito Horta-Guinardó han vuelto a concentrarse en la plaça Sanllehy para protestar contra el sistema de transporte público que les viene afectando en los últimos tiempos.
Como en otras ocasiones antes de agosto, los vecinos de los barrios de La Salut, Guinardó, Baix Guinardó, Font Fargues, Carmel y Can Baró han reivindicado este jueves la mejora del transporte público en sus distintos barrios, cortando durante varios minutos todas las confluencias viarias que confluyen en la plaza.
La clave de la protesta sigue centrada en sus quejas por los recortes y cambios en diferentes líneas de autobús, especialmente la del Nº24, así como en reclamar que vuelvan a activarse las obras para que la Línea 9 del metro abra la estación que llevará el nombre de la plaza.
En esta ocasión, a la manifestación ha acudido hasta un grupo de percusión, los Trons de Can Baró.
Los vecinos siguen considerando que la gran solución para el transporte en la zona sería reanudar las obras de la Línea 9, que hace ya años quedaron sin terminarse y que provocó que nunca se hayan podido abrir las estaciones de Sanllehy y El Putxet.
LA LÍNEA 9
"Disponer del metro en la plaza Sanllehy ha sido siempre una reivindicación prioritaria", explica Josep, uno de los miembros de la Asociación de Vecinos de Can Baró. "Cuando se pararon las obras, la estación estaba prácticamente hecha sobre la plaza Sanllehy, pero se llevaron la tuneladora, dejaron de perforar y nos dejaron tirados".
"(Ada) Colau y el Ayuntamiento se comprometieron a paliar los efectos de los cambios en el bus Nº24, que ahora se queda en plaza Catalunya y no llega al Paralelo", critican desde la plataforma vecinal. "Dijeron que pronto solucionarían los problemas de transporte, pero pasan los meses y seguimos igual".
EL BUS Nº 24
La línea del 24 continúa yendo sobrecargada debido a que la utilizan muchos turistas para acceder al Parc Güell o a las baterías antiaéreas del Turó de La Rovira, lo que este verano sigue provocando problemas de movilidad a los vecinos que viven en sus alrededores, ya que los vehículos van siempre sobrecargados de turistas.
Además, la masiva afluencia ha causado problemas nocturnos, con broncas y ruidos permanentes, ya que son lugares que se han convertido en puntos de cita de numerosos grupos de guiris que quieren presenciar el amanecer o el anochecer en Barcelona desde las alturas y con maravillosas vistas.
Como la cosa no acaba aquí, las asociaciones vecinales de los distintos barrios han convocado a sus conciudadanos para volver a manifestarse y cortar la plaza Sanllehy el próximo jueves, día 13 de septiembre, a la misma hora (7 de la tarde) y en el mismo lugar.