El Morad está en boca de todos. En muy poco tiempo, el artista ha conseguido elevar sus canciones a las listas de éxitos con millones de reproducciones y ha revolucionado el panorama musical. Morad El Khattouti El Horami –nombre real– nació en el barrio de La Florida de l'Hospitalet de Llobregat en 1999. Algunos lo conocen y admiran por su música y a otros, en cambio, el nombre de El Morad les recuerda a juicios, redadas y un supuesto robo por el que la Fiscalía pide 2 años y medio de prisión para el rapero.
El artista evita hablar de sus asuntos más turbios, se aleja de todo aquello que aparece en titulares. "Soy un chico que se gana la vida cantando, solo quiero estar tranquilo", decía el pasado 9 de febrero, cuando se celebró el juicio por el asalto del que se le acusa. No obstante, en sus letras es fiel a sus creencias y dice, sin pelos en la lengua, que "odia a los picolos" o "que le den a los Mossos d'Esquadra".
ORÍGENES
De ascendencia marroquí, es conocido por lucir su bandera con orgullo en sus apariciones públicas. Nació el 5 de marzo de 1999 y comenzó a cantar a los 14 años. ¿Sus inicios? Sencillos audios que compartía por Whatsapp con sus amigos. En las plazas de la Florida empezó todo y ahora sus canciones encabezan las listas de éxitos de las grandes plataformas municipales. Todo ello como artista independiente.
El Morad se aleja de los políticos –de los que renuncia hablar o opinar–, de las instituciones, y también quiere mantenerse al margen de los empresarios de la industria musical. "Ahora veo que 'toy haciendo lo que quiera, y tú apretado con interés de disquera", canta en su éxito Pelele.
Bizarrap y Morad, juntos en la grabación de su última colaboración / RRSS
CRÍTICA SOCIAL
En sus letras narra sus orígenes y habla sin tapujos de la delincuencia y la situación marginal que vivió. Los estragos de su pasado le acompañan en todos sus éxitos y son una parte fundamental de su imagen. Siempre está en el foco de la polémica y es algo que le define y al mismo tiempo le enorgullece.
Detrás de su apariencia –chandal Lacoste, riñonera o bandolera, gorros y capuchas– hay un joven de 22 años que quiere contar la historia del barrio (La Florida) a su manera.
Bloques de la Florida / METRÓPOLI
DELINQUIR PARA SOBREVIVIR
La trayectoría de Morad y los suyos en su barrio no se entiende sin su lucha contra la policía. Los agentes son su enemigo principal porque "persiguen a los que delinquen para sobrevivir". En este sentido, también reitera que "odia a los chivatos": todos los que se "chivan" de los delitos se convierten en "cómplices de los cuerpos policiales".
Para el cantante, los buenos son "los fieles", los que se protegen entre ellos y se cubren las espaldas en un ambiente de humildad –que el artista no concibe sin delincuencia–. Y Morad no esconde sus delitos del pasado: "No tenía para entrar en las tienda', dudo que ese mundo tú ya lo entienda', me tenía que robar to'a las prenda'", canta en su canción junto a Bizarrap (Season 47).
LA FAMILIA
Morad delinquía por su familia, dice. Así lo deja entrever en sus versos. A "la mama" –su madre–, la que es la persona más importante para el cantante, no le puede faltar de nada. En la mayoría de sus hits la nombra y la protege por encima de cualquier otra figura. De hecho, en una aparición pública, el cantante se enfadó con algunos de sus seguidores por grabarla sin su consentimiento.
"Y la mama es la primera, eso nunca cambiaré (ala), e-en la mente siempre la tendré, eh, eh", dice también en Morad: Bzrp Music Sessions, Vol. 47. Pero la delincuencia "por necesidad" es algo que ya ha quedado en el pasado, o así lo dejó ver en el juicio del pasado día 9 de febrero. "No tenía ninguna necesidad económica de cometer el robo con fuerza. Estaba en plena dedicación intentando arrancar mi carrera musical", insistió ante el juzgado penal número 11 de Barcelona.
MDLR
Hace unos años nadie habría imaginado que las siglas MDLR llegarían tan lejos. Todavía hay muchos que desconocen su significado pero cada vez son más aquellos que se preguntan de dónde vienen al escucharlo en las canciones que encabezan las listas de éxitos de las principales plataformas de música. Fue Morad, el chico de la calle más famoso del país, quién trajo esta expresión francesa a España.
Las siglas corresponden a Mec de la rue –chico de la calle en francés– y el artista de l'Hospitalet las introdujo en sus canciones, que se enmarcan en el drill, un estilo con rasgos en común con el rap francés de origen magrebí. De hecho, su primera canción con la que se introdujo en el panorama musical se titula MDLR.
Morad junto a varios niños en La Florida / INSTAGRAM
PASADO DIFÍCIL
En sus letras el artista no solo hace referencia a los robos para sobrevivir. "Que en la calle no es el más chulo quién vende, sino quien no habla de sus movimientos", dice en su tema No Son De Calle, en el que critica a los que aparentan ser de barrio pero en realidad han tenido "una vida fácil".
En esta canción, igual que en otras, deja entrever su pasado en el negocio de las drogas. Varios vecinos de la zona todavía lo sitúan en el mundillo, aunque el rapero presume orgulloso de que a día de hoy puede vivir de la música. El trapicheo también lo interpreta como algo necesario. De hecho, testigos cercanos al artista aseguran que él mismo ha estado inmerso en situaciones muy complicadas a raíz de este tipo de negocios.
ESTUDIOS DE GRABACIÓN
Mientras Morad seguía experimentando con sus letras improvisadas y continuaba con su vida "humilde", conoció al cantante Beny Jr. y empezó a acompañarle a los estudios de música. Después de un tiempo, se atrevió a cantar y grabar canciones.
Empezó a ganar fama en 2019 con MDLR, su éxito en el que acumula casi 23 millones de visitas. Tras conseguir un inesperado salto a la fama, Morad colaboró con $kyhood en el sencillo A Escondidas, que consiguió ser disco de platino.
Portada de la colaboración de Morad junto a $kyhook / YOUTUBE
SALTO A LA FAMA
Su primer EP llegó un año después de alcanzar la fama: MDLR 2.0. En noviembre de 2020 lanzó uno de los sencillos que más le caracterizan: Motorola. Ha colaborado con artistas como Jul --máximo exponente del trap en Francia--, 3robi o Capo Italia.
Una de sus últimas canciones, Pelele, se hizo viral antes de ser publicada. Ha sido durante mucho tiempo tendencia en YouTube y en TikTok, la red social del momento, es uno de los trends más famosos. Ahora los fanáticos que siguen al artista esperan ansiosos la pubicación de su primer álbum.
ARTISTA INDEPENDIENTE
En las últimas semanas el Morad logró convertirse en el primer artista español en mantener el #1 y el #2 de Spotify España durante más de un día. El artista se enorgullece de haber conseguido estos reconocimientos como un artista independiente.
El rapero presume de no tener inversiones de discográficas ni radios. "Yo he conseguido todo esto y más con mi público", agradece en sus redes sociales. "Tanto trabajo en silencio, tanto sufrimiento en silencio, gracias a saber currar con naturaleza y paso a paso tenemos nuestro fruto después de tanto sembrar gratis", añade.
El cantante Morad durante su actuación en una Gallery Session / YOUTUBE
PROBLEMÁTICA EN LA FLORIDA
El éxito de Morad y de sus videoclips, que siempre graba en la Florida –hasta el argentino Bizarrap se desplazó hasta el barrio para promocionar su canción– crece al mismo nivel que el hartazgo policial y vecinal.
En La Florida son muchos los que critican las fechorías del cantante y de su banda. Denuncian –casi siempre de forma anónima por miedo– que generan escándalos, actividades peligrosas e incluso se enfrentan a los agentes de policía.
"EN SU BARRIO SON LOS REYES"
Estos sucesos han colmado la paciencia de los guardias urbanos de L'Hospitalet. Algunos de ellos –fuentes anónimas– señalan que "Morad hace lo que quiere cuando quiere. En su barrio son los reyes". "Se reúne con todos los personajes de los bloques que son sus comparsas y sin permiso ninguno circulan con quads de gasolina por la plaza o hacen caballitos con las motos", añaden.
Desde la policía de L'Hospitalet explican que "la competencia de orden público" corresponde al cuerpo de los Mossos d'Esquadra, que "no vienen y acude la Guardia Urbana a hablar de buenas maneras". Y es que la policía local no tiene formación antidisturbios para actuar en algunas situaciones "peligrosas".
Operativo policial en los Bloques de la Florida de l'Hospitalet / AJUNTAMENT DE L'HOSPITALET
RESOLUCIÓN JUDICIAL
La defensa del cantante pide una sentencia absolutoria para el crimen del que se le acusa. Según alega, la declaración de la víctima es contradictoria a lo largo de toda la instrucción y no existen daños ni pruebas que demuestren la acusación.
Además, defiende que la identidad de los acusados, Kevin Moreno y Morad, no se ha podido demostrar. La parte contraria asegura que las imágenes, la intervención de los Mossos d'Esquadra de l'Hospitalet y las grabaciones presentadas por su cliente "garantizan con certeza" su implicación.