Colau se alía con seis ciudades para gestionar públicamente el agua

El Día Mundial del Agua ha sido la fecha elegida para presentar la nueva Asociación de Municipios para la Gestión Pública del Agua. Un ente que repliega a los consistorios de Barcelona, Badalona, Cerdanyola, Santa Coloma, El Prat, Sabadell y Terrassa para coordinar esfuerzos en la remunicipalización del servicio. De hecho, el movimiento responde a lo que ya prometieron estas fuerzas políticas antes de la elecciones: la recuperación de la gestión pública del agua.

“Durante mucho tiempo no hemos sido conscientes de que el agua es fuente de calidad de vida y bienestar; ello nos ha hecho olvidar la gestión de este bien y ahora nos encontramos con las consecuencias”, ha señalado la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. Ella misma ha criticado que el bien de primera necesidad haya sido “tratado como mercancía y no como derecho básico” por parte de las empresas subministradoras.

"POLÍTICAS RADICALES"

“Estamos ante un ejercicio de cooperación municipal”, ha sintetizado la alcaldesa de Badalona, Dolors Sabater. “Son políticas radicales, porque van a la raíz del problema, ha añadido, tras recordar el fuerte movimiento de protesta que tuvo lugar hace 25 años contra “la subida abusiva del precio del agua”. “Ahora, con muchos años de retraso, damos respuesta a una reivindicación ciudadana”. Tal como ha rememorado posteriormente Colau, “desde hace 150 años el agua de Barcelona esta en manos privadas; aunque se terminó haciendo una empresa mixta, en la que la participación pública es mínima”.

“Sabemos que lo que estamos haciendo incomoda a la hegemonía, a la élite y a quienes perderán sus intereses; somos conscientes que recibiremos críticas como consecuencia de esta acción valiente”, ha recalcado Sabater. Una idea a la cual el alcalde de Sabadell, Juli Fernàndez, ha añadido que: “Quien tiene la legitimidad para [recuperar la gestión pública del agua] son los representantes políticos elegidos democráticamente por los ciudadanos”.

ABIERTOS A MÁS INCORPORACIONES 

Los siete ayuntamientos que se han asociado implican a tres de cada cuatro ciudadanos del Área Metropolitana de Barcelona (AMB). Una suma a la cual, los consistorios fundadores abren los brazos a cualquier municipio que se quiera adherir o recibir asesoramiento para proceder a la recuperación del subministro. “Esperamos que otras ciudades se sumen a configurar este espacio, diferenciando lo que es el la contratación pública de lo que es un bien público; un derecho”, ha enfatizado la alcaldesa de Santa Coloma, Núria Parlon.

La asociación también cuenta con la participación de Terrassa, aunque no pertenezca a la AMB. Ello es porque hace escasos meses el municipio emprendió el camino hacia la gestión directa del agua, después que a la empresa suministradora le hubiese caducado la concesión a 75 años. Su alcalde, Jordi Ballart, ha expresado que “somos pioneros de un gran cambio, político y social; un cambio histórico”. “Estamos participando en una auténtica globalización de los derechos de las personas, cuando hasta ahora solo beneficiaban estos derechos a los mercados y a las compañías”, ha aseverado.

EL PRAT, LA REFERENCIA

El séptimo municipio que se ha unido a la asociación llega con los deberes hechos. En 1988, El Prat del Llobregat ya decidió crear una empresa municipal pública del agua, para evitar la “sobre-explotación del acuífero por parte de las empresas”, ha explicado su alcalde, Lluís Tejedor. El máximo responsable político ha recordado como, a partir de la recuperación del ciclo del agua, la ciudad, “comprometida con el municipalismo”, ha conseguido “recuperar la biodiversidad del río Llobregat, mejorar la calidad del agua, ponerle un precio público muy competitivo y mejorar su litoral”. “Nuestro bagaje lo ponemos al servicio de la nueva asociación”, ha expresado Tejedor. Un ejemplo que, para Colau, representa la posibilidad de “una gestión pública más eficiente y más eficaz”.