Trabajadores municipales critican la falta de transparencia del Ayuntamiento
El equipo de Ada Colau encarga una auditoría sobre el origen de la deuda del Pamem
20 junio, 2017 13:17Noticias relacionadas
La comisión municipal de Derechos Sociales ha abordado este martes la supresión de la mutua municipal Instituto de Prestaciones de Asistencia Médica al Personal Municipal (Pamem) entre las protestas de trabajadores del Ayuntamiento por la decisión.
Representantes sindicales se encontraban entre los participantes de la protesta y han solicitado más transparencia en este proyecto, por el cual los 8.279 usuarios -2.626 funcionarios en activo y el resto, pensionistas y beneficiarios- cubiertos por el Pamem pasarán al sistema de cobertura pública del Servicio Catalán de Salud (CatSalut).
Sólo la coalición de gobierno, Barcelona en Comú y PSC, han votado a favor de la medida. El resto de fuerzas ha ejercido su derecho a reservarse el voto para el pleno que se celebrará la próxima semana. Eso sí, han coincidido en solicitar al Ayuntamiento más diálogo.
CRÍTICAS SINDICALES
La secretaria general de CC.OO. en el Ayuntamiento, Maria Rosa Tomàs, ha criticado una "falta de transparencia en todo el proceso" y ha aseverado que la mala gestión de la mutua no debería suponer que los trabajadores del consistorio dejen de tener un derecho que ya tenían.
El representante del Sindicato de Agentes de la Policía Local (Sapol) Manel García ha pedido que se mantenga el Pamem y ha recordado que la Guardia Urbana y los Bomberos de Barcelona son los colectivos que más afiliados tienen, y ha sostenido que se ha llegado a esta situación por una "mala gestión".
El secretario de organización del Csif en el Ayuntamiento, Eugenio Zambrano, ha expresado el rechazo del sindicato a la supresión del Pamem, y ha lamentado que usen el déficit como un argumento para hacerlo: "El déficit lo han generado ellos" por esta mala gestión, según él.
INVESTIGACIÓN ABIERTA
La comisionada de Salud, Gemma Tarafa, ha destacado en su intervención que, desde el Gobierno de Ada Colau, son "conscientes de que un cambio como este puede generar inquietud, miedo, incertidumbre e incluso descontento", por lo que han impulsado diversas medidas para acompañar a los usuarios durante el proceso.
Así, han celebrado 20 sesiones informativas a las que han asistido unas 900 personas; han registrado 5.650 llamadas tanto recibidas como realizadas, y 374 pensionistas ya han pasado al CatSalut, ante lo que trabajadores han espetado que lo han hecho engañados y la han acusado de mentir.
Tarafa ha explicado que han encargado una auditoría para aclarar cómo se ha generado el déficit de 22,9 millones, y se han ofrecido a crear una comisión de seguimiento del proceso para compartir información con los usuarios.
El Pamem es una entidad pública participada por el Ayuntamiento -con un 60%- y la Conselleria de Salud -con un 40%- adscrita al Consorci Sanitari de Barcelona (CSB), que el consistorio creó en 1950 para ofrecer asistencia sanitaria a los funcionarios y que llegó a atender a más de 32.000 personas.