La Guàrdia Urbana ha retirado esta noche adhesivos y carteles electorales de la Candidatura d´ Unitat Popular (CUP) de Barcelona que estaban enganchados en "espacios no autorizados", según han indicado fuentes del Ayuntamiento de Barcelona.
En un comunicado, la CUP ha explicado que anoche, en el arranque de la campaña de las elecciones del 21 de diciembre, agentes de la Guàrdia Urbana "requisaron" material de propaganda electoral que se disponían a pegar algunos integrantes de la formación anticapitalista en los barrios de Clot-Camp de l'Arpa y la Verneda.
Primero, según fuentes municipales, uno de los activistas fue denunciado bajo la amenaza de una sanción de 300 euros. Posteriormente, los agentes procedieron a "arrancar adhesivos y carteles" que el partido ya había enganchado en lugares no aptos para la propaganda electoral en ambos barrios.
LA CUP SE QUEJA A COLAU
La CUP, considera que la actuación de la Guardia Urbana constituye un "ataque frontal a la libertad de expresión" y "a las mínimas garantías democráticas" de las elecciones del 21-D "impuestas" por el Estado. Por ello, el partido anticapitalista "exige" la "anulación inmediata" de la denuncia contra el citado activista y que no se le imponga "ningún tipo de sanción ni de multa”. Los anticapitalistas han calificado la acción de la Guardia Urbana como “un acto de represión”.
Finalmente, la formación se ha dirigido al gobierno de Ada Colau de que el uso de "organismos municipales" como la Guardia Urbana contra candidaturas supone "romper la neutralidad electoral del ayuntamiento" y avisa de que "en caso de repetirse actuarás en consecuencia para garantizar la igualdad de condiciones”.