Una consejera del distrito de Gràcia de Barcelona en Comú, Àngels Tomàs, participó en la recogida de firmas para la multiconsulta con la que el gobierno de Ada Colau quería justificar la remunicipalización del agua. De este modo, la consejera rompió la neutralidad que se supone debe mantener el Ayuntamiento de Barcelona, según establece el Reglamento de Participación Ciudadana municipal.
La consejera coorganizó varios puntos de recogida de rúbricas para la multiconsulta para remunicipalizar el agua en Barcelona. En total, la iniciativa ciudadana consiguió unas 26.000 firmas. Las dos preguntas de la multiconsulta, entre ellas la que se planteaba sobre el agua, fueron tumbadas por la oposición en un pleno extraordinario el pasado 10 de abril. Según avanza Crónica Global, Tomàs se jactó de su participación con fotografías en las redes sociales.
La participación de esta consejera en la recogida de firmas vulnera el artículo 1.2 del Reglamento de Participación Ciudadana: "Los diversos instrumentos de participación regulados en este reglamento se someten a los principios de transparencia, publicidad, claridad, acceso a la información y neutralidad institucional...", recoge el artículo.
El mismo Reglamento en su artículo 79.3 subraya que el Ayuntamiento, durante el periodo de debate público, debe promover la participación ciudadana "sin que, en ningún caso, pueda influir en la orientación de las respuestas, de manera que garantice la transparencia, la igualdad de oportunidades y el respeto al pluralismo político".
Tomàs percibe por su cargo como consejera del distrito de Gràcia 32.040 euros brutos, que, tras la aplicación del código deontológico de Barcelona en Comú, queda en 1.800 euros netos al mes.