La alcaldesa Ada Colau ha reclamado este jueves centrar la próxima campaña electoral de las municipales en Barcelona. “Barcelona tiene un proyecto propio. Los ciudadanos se merecen que se hable de la ciudad”. Según Colau, las próximas elecciones “no tienen que servir para levantar murallas” y considera que una "política de bloques, tanto independentista como unionista, no sería buena para la ciudad".
Colau ha ofrecido una conferencia en el Fòrum Europa, en el Hotel Palace de la capital catalana, coincidiendo con los tres años exactos de su victoria electoral en las elecciones de 2015. Presentada por el catedrático de Política Económica, Antón Costas, la alcaldesa ha pedido también a las fuerzas politicas dejar fuera del debate electoral tres temas: "el narcotráfico que afecta a Ciutat Vella, la financiación del transporte público y la subida abusiva de los precios de alquiler". Sobre estas cuestiones, "hay que bajar la bandera electoral".
Sobre la situación en el Raval, donde el último año y medio han proliferado los narcopisos, Colau ha dicho que se está trabajando para mejorar una situación que ha afectado a la convivencia de los vecinos. La alcaldesa ha recordado el acuerdo con el PDeCAT para poner en marcha un plan de choque para combatir el narcotráfico en esta zona de Barcelona y al que espera que se sumen otras fuerzas políticas.
ALQUILERES ABUSIVOS
La alcaldesa ha apuntado que los precios abusivos de los alquileres es uno de los graves problemas que tiene Barcelona y toda el área metropolitana y cree que es una cuestión sobre la que los partidos deben evitar enfrentarse. En opinión de Colau, para revertir esta situación, se tiene que ampliar la duración de los contratos de alquiler, que ahora son de tres años, y evitar la subida descontrolada de precios.
"Es una situación que está afectando a las clases medias y a la gente joven, que se está yendo de la ciudad. Se necesita garantizar viviendas accesibles". Según la edil, la crisis de la vivienda está llegando también a empresas que se quieren instalar en la ciudad y que tienen dificultades para encontrar pisos para sus empleados a precios correctos.
500 MILLONES MENOS
Colau también cree que hay que dejar de lado de la carrera electoral la financiación del transporte público. La alcaldesa se ha mostrado muy crítica con el Estado. "Ha dejado de aportar unos 500 millones los últimos años", ha asegurado. El transporte público en el área metropolitana es deficitario y se paga con las aportaciones del Ayuntamiento, la Generalitat, el Estado y el Área Metropolitana de Barcelona, y los billetes de los ciudadanos. En total, las administraciones han aportado en 2017 unos 720 millones de euros. La Generalitat ha pagado 360,9 millones; el Ayuntamiento, 136,6; el Área Metropolitana de Barcelona, 114,4, y el Estado, 108,4 millones.
Sobre las elecciones, Colau ha opinado también sobre el baile de nombres que se barajan para optar a la alcaldía, entre ellos el exprimer ministro francés, Manuel Valls, que podría encabezar la lista de Ciutadans o una lista unionista. La alcaldesa ha subrayado que "es una mala noticia" que se hable más de ellos que de su proyecto para la ciudad. En la misma línea, Colau considera que si determinadas fuerzas concurren aunidas en plataformas independentistas o unionistas, los comicios se desvirtuarán.
"La politica de bloques sería mala para Barcelona. No necesitamos muros. Necesitamos espacios de diálogo y hablar de la ciudad. Los acuerdos que se hagan tienen que estar centrados en Barcelona", ha valorado Colau. Curiosamente, los comuns rompieron el pacto con el PSC de Jaume Collboni por el apoyo socialista a la aplicación del artículo 155 en Catalunya.