La limpieza de las calles es otra asignatura pendiente del actual gobierno municipal. Barcelona es una ciudad sucia, según el primer Barómetro de Barcelona elaborado por Centre d'Estudis Sociològics (CES) para Metrópoli Abierta. En el mismo, los barceloneses suspenden la política de vivienda de Ada Colau y desconfían de su gestión de los principales problemas de la ciudad.
Los barceloneses consideran que la suciedad es otro problema por resolver del actual gobierno municipal. El 32,9% de los ciudadanos que opina que Barcelona ha empeorado desde 2015 cita la falta de limpieza de las calles como el principal motivo de su malestar. En segundo lugar (18,2%), los habitantes señalan la seguridad ciudadana y el aumento de la delincuencia, y el 14,9% se queja del turismo (masificación, peor calidad, convivencia). El tráfico y los carriles bicis ocupan el cuarto y el quinto puesto de las quejas.
MÁS PORQUERÍA EN LAS CALLES
Gràcia, el distrito que lidera Eloi Badia, es el más crítico con la suciedad de Barcelona. Entre los ciudadanos que cuestionan la gestión de la alcaldesa desde su victoria electoral, hace tres años, el 55 % denuncia la porquería de sus calles como el aspecto que más ha empeorado de su entorno. En Sant Andreu, el malestar con la limpieza es citado en primer lugar por el 47,4% de sus habitantes. En el Eixample, el porcentaje es del 34,5%.
La suciedad es el problema de barrio más mencionado en todos los distritos, excepto en Ciutat Vella (turismo) y Sarrià-Sant Gervasi (ruidos). Gràcia, Nou Barris, Sant Andreu y Eixample son los distritos más críticos con la limpieza de la ciudad.
MALA GESTORA
Los barceloneses, como detallamos en la primera entrega del Barómetro de Barcelona, no confían en la alcaldesa para resolver los problemas de la ciudad. El 57% expresa su disconformidad con la gestión de Colau y sorprende que solo 15 de cada 100 votantes de Bcomú opina que su líder municipal lo está haciendo bien. Únicamente el 36% de los barceloneses cree que Barcelona ha mejorado desde 2015.
LOS BARRIOS, MUY CRÍTICOS
Colau se aleja de los barrios. De los vecinos. Los más críticos con la gestión de la alcaldesa son los de Sarrià-Sant Gervasi, Eixample y Les Corts, mientras que los más conformistas son los de Sant Martí, Horta-Guinardó y Gràcia. No obstante, Colau solo aprueba en Sant Martí. En los nueve distritos restantes, suspende. Significativo es su batacazo en un feudo afín como Nou Barris.
SUSPENSO EN VIVIENDA
Las políticas de vivienda de Colau tampoco convencen a los barceloneses, que puntúan con un 4,2 la gestión de la alcaldesa. Por edades, el sector nás crítico es el comprendido entre los 25 y los 44 años. El 20,4% de los ciudadanos considera que la problemática de la vivienda requieres actuaciones urgentes. Por distritos, los vecinos más críticos son los del Eixample.
Los resultados de esta encuesta de satisfacción de los barceloneses se han obtenido tras realizar 600 entrevistas a hombres y mujeres de 18 años o más empadronados en Barcelona con derecho a voto en las elecciones municipales de 2019. Con un nivel de confianza para los resultados del 95,5%, las entrevistas se realizaron entre el 4 y el 11 de junio de 2018.