Colau recibe otro varapalo por la inseguridad en Barcelona

Nuevo varapalo en cuestiones de seguridad para la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. El pleno extraordinario que se ha celebrado en el Ayuntamiento para hablar sobre temas de seguridad en la ciudad de Barcelona se ha convertido en un reguero de reproches a la alcaldesa, que también es la máxima responsable de seguridad de la ciudad, por la situación a la que ha llevado a Barcelona.

Desde el aumento exponencial del número de delitos en los últimos años hasta el abandono en que ha dejado a la Guàrdia Urbana, las críticas a la gestión de la alcaldesa han sido contundentes. O desde el aumento de un 21 % del número de delitos que se cometen en la ciudad, mientras que, por ejemplo, en Madrid ha sido de apenas el 1 %, hasta el hecho de que el 60 % de los ciudadanos de Barcelona consideran que la inseguridad es lo que más les preocupa.

Por ello, PDeCAT, ERC, PSC, Ciutadans y PP han votado a favor de la reprobación, mientras que la CUP se ha aliado con Barcelona en Comú para votar en contra. Los dos regidores no adscritos se han abstenido, por lo que se ha aprobado reprobar la gestión del gobierno municipal en materia de seguridad e instar a cambiar las políticas municipales en este ámbito.

FRACASO

Ha sido el regidor del PDeCAT Jordi Martí el que ha empezado el turno de palabra. Y en su discurso ha hablado de que “en Barcelona la inseguridad es el problema número uno de los ciudadanos y es un fracaso del Ayuntamiento. Nadie del consistorio se ha ocupado del día a día de la seguridad”. Además, ha acusado a la alcaldesa de “tener un problema de origen ya que no creen en la policía ni en su función. Llegaron al gobierno plagados de prejuicios y tardaron tres años en reconocer que la policía es necesaria. Y todo eso ha llevado a que Barcelona sea la ciudad más insegura del Estado”.

Por su parte, el regidor de ERC Jordi Coronas ha recordado que la situación “puede agravarse en los próximos meses por las jubilaciones que se pueden producir en la Guàrdia Urbana. Se han de mejorar los recursos materiales y humanos, ofrecer menor formación y, sobre todo, decidir qué modelo de seguridad queremos para la ciudad”.

ANIMADVERSIÓN

Carina Mejías, de Ciutadans, ha acusado a Colau de “tener animadversión a aplicar la autoridad. Por eso han tardado tres años en darse cuenta de que la función de la policía es necesaria”.

Mejías ha afirmado que “lo que pasa en Barcelona no ocurre en ninguna otra ciudad española. Lo que hay que hacer es dejar de lado el buenismo”, y le ha pedido que si necesita refuerzos para luchar con el narcotráfico, “recurra a la Guardia Civil”.

Ada Colau se dirige a un grupo de agentes de la Guàrdia Urbana / AJUNTAMENT

El líder del PSC en el Ayuntamiento, Jaume Collboni, ha empezado su discurso afirmando que “Barcelona tiene un problema de seguridad. Y es evidente que, por ejemplo, las redadas en Ciutat Vella son un síntoma de fracaso”.

Para Collboni, es importante que la policía tenga "fuerza disuasoria y para ello es necesario que se sienta apoyada por los políticos, y para eso es necesario que se haga una declaración pública de apoyo a la Guàrdia Urbana. Pero esta reprobación ya la hemos hecho anteriormente y lo que los ciudadanos esperan es que se adopten medidas”.

ENTUSIASMO

Por su parte, el líder del PP, Alberto Fernández Díaz, ha empezado su discurso afirmando que “esta reprobación la voto con todo el entusiasmo del mundo”, y le ha preguntado a Colau “¿cuántos delitos más deben producirse para que se revise el vigente plan de seguridad de la ciudad?”, al tiempo que ha recordado que “la seguridad de la ciudad depende del Ayuntamiento y la Generalitat, por lo que habría que reprobar a Colau y Torra”, y ha pedido a la alcaldesa que “deje atrás su alergia a la ley y a la policía”.

LA CULPA, DE LOS DEMÁS

Por su parte, Ada Colau ha repartido la culpa entre el resto de las administraciones y ha elogiado el enorme esfuerzo que, según ella, ha hecho el consistorio en temas de seguridad.

Entre otras cosas, ha asegurado que “en este periodo ha habido muchas manifestaciones, por lo que ha habido muchos agentes de la Guàrdia Urbana que se han tenido que destinar a vigilarlas”, para añadir posteriormente que “nos importa la seguridad y cada año aumentamos la plantilla de la Guàrdia Urbana en lo que nos permite la ley. Sin embargo, no se ha producido un aumento del número de mossos, y de ellos también depende la seguridad en la ciudad”.

RESPETO A LA GUÀRDIA URBANA

Según Colau, “siempre he tenido el máximo respeto y consideración por la Guàrdia Urbana, y en Barcelona la responsabilidad de la seguridad depende también de la Generalitat”.

Además, ha asegurado que el aumento de los delitos en Barcelona no es algo anómalo ya que “tenemos los mismos problemas específicos, como el narcotráfico, que las demás grandes ciudades. Pero si nos atenemos a Catalunya, el aumento de los hurtos se ha producido en todo el territorio, por lo que el problema no es solo de Barcelona”.