Los servicios sociales de Barcelona está colapsados. Hasta 20 días de media tardan los trabajadores municipales en atender las primeras visitas de ciudadanos en situación de vulnerabilidad. Las cifras las ha facilitado la propia alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, este viernes en el pleno a pregunta de la regidora de Ciutadans, Marilén Barceló. El tiempo de espera ahora está igual que en diciembre de 2014, cuando en la ciudad mandaba Xavier Trias, es decir que durante el gobierno de los comuns no se ha producido ninguna reducción de tiempo para acceder a los servicios sociales, según Ciutadans.
Barceló, que será la responsable de servicios sociales en caso de que Manuel Valls gobierne en el Ayuntamiento, ha reprochado a Colau que este mandato el consistorio se ha gastado 1,7 millones en la reforma de los servicios sociales sin que eso haya una supuesto una reducción del tiempo de espera. Según Colau, este mandato las visitas a los servicios sociales se han incrementado un 13%, con 9.723 más atendidas. La primera edil asegura que pese a la creciente "presión asistencial", el tiempo de espera se ha reducido un 25%, hasta los citados 20 días. En un año se ha llegado a atender a 81.000 personas.
MÁS PROFESIONALES
La regidora de Ciutadans opina que una persona con problemas tiene que ser atendida durante la primera semana en la que solicita visita. "No hay poner obstáculos. Los empleados hacen mucho trabajo administrativo y hay que reducirlo. También hay que dar a los empleados más herramientas. Ustedes han invertido, pero además de invertir hay gestionar de una manera más eficiente", ha espetado Barceló a Colau, que ha sacado pecho por el aumento del número de profesionales en un 34% en cuatro años, de 550 a 738.
Pese a que el gobierno de Colau quería reducir las desigualdades en la ciudad, las cifras que baraja el partido naranja concluyen que la pobreza sigue instalada a muchos niveles en Barcelona: un 20% de personas están riesgo de pobreza, una lista de espera de 8.000 barceloneses para el informe de dependencia, 1.000 ciudadanos siguen durmiendo en las calle de la capital catalana y hay 200 menores en los asentamientos irregulares dispersados por la ciudad.
SIN TECHOS FORÁNEOS
Sin aportar cifras, Colau ha respondido que Barcelona es la ciudad del Estado con mayor inversión social. La alcaldesa también ha afirmado que el Ayuntamiento está supliendo la falta de aportaciones económicas de la Generalitat y el Ayuntamiento y que si hay una urgencia se atiende enseguida. "Cualquiera que está en contacto con los servicios sociales sabe que tienen más recursos que nunca". La alcaldesa, como ya ha hecho en otras ocasiones, ha acusado a la Generalitat de enviar a Barcelona a personas sin techo que viven en otras ciudades del área metropolitana para que sean atendidas en la capital catalana por el Ayuntamiento.