Manuel Valls ve "un desastre" la llegada del independentismo a la Cambra de Comerç de Barcelona. El alcaldable de Barcelona pel Canvi-Ciutadans se ha mostrado preocupado por la victoria de las candidaturas soberanistas en la organización empresarial barcelonesa. "Creo que una institución tan importante caiga en manos de los independentistas radicales es muy grave", ha dicho Valls en un acto en Foment del Treball el mismo día en que se inicia la campaña electoral.
En opinión del candidato a la alcaldía de Barcelona, la llegada del independentismo a la Cambra del Comerç, donde ha conseguido 30 de las 40 sillas del pleno, "tendrá consecuencias en Fira de Barcelona y en Turisme de Barcelona". Según Valls, el independentismo tiene una agenda que pasa, después de ganar las elecciones generales, por conseguir el Ayuntamiento de Barcelona, y teme que la victoria en la Cambra se acabe trasladando a otros entes económicos como los citados.
CONTRA UNA ALIANZA DEL POPULISMO Y EL INDEPENDENTISMO
En la casa de los empresarios catalanes, Valls ha reiterado un mensaje que ha lanzado a lo largo de los últimos meses. En las elecciones del próximo 26 de mayo, la ciudad se juega mucho. Para el exprimer ministro francés, la prioridad es evitar que el consistorio barcelonés caiga en manos de "una alianza" formada entre el independentismo de Ernest Maragall y el populismo de Ada Colau. Según Valls, las elecciones municipales están muy abiertas y no cree que los barceloneses voten igual que en las generales,
A pregunta de los empresarios, el exalcalde de Évry ha asegurado que tiene intención de quedarse en el Ayuntamiento de Barcelona aunque pierda las elecciones municipales. "He venido a Barcelona por razones personales, íntimas, pero a mis 57 años ya no empezaré otro proyecto político. Cogeré la responsabilidad que me den los barceloneses. Si los ciudadanos quieren que sea regidor, seré regidor. Si quieren que sea alcalde, seré alcalde. He venido para quedarme. Por primera vez estoy en un proyecto en el que no me juego nada. Ya lo he hecho todo en política", ha destacado Valls, que "jamás" ha perdido unas elecciones directas.
"AUTODETERMINACIÓN, NO"
Sobre los pactos postelectorales, Valls ha dicho que la prioridad en todas las elecciones tiene que ser grandes acuerdos entre los partidos constitucionalistas. "También en el Ayuntamiento. No pactaré ni con independentistas ni con Colau. Lo he dicho muchas veces. Me gustaría pactar con Jaume Collboni y con el PP, si entra". El alcaldable ha preguntado en voz alta sobre las prioridades de pactos que tiene Collboni. "Dice que quiere un pacto de izquierdas. ¿Quiere reeditar un tripartito? ¿Pactar otra vez con Colau?, ¿O con Maragall, que quiere convertir Barcelona en capital de una república imaginaria?".
Valls también se ha posicionado en contra de la celebración de un referéndum de autodeterminación aunque un 80% de la población catalana lo reclamara. "Autodeterminación, no. Estamos atravesando los mejores 40 años de España a partir de los acuerdos de 1978. La Constitución no permite la autodeterminación. Soy claramente constitucionalista. El independentismo nos llevaría al desastre, como ha pasado en la Cambra de Comerç".
CRONIFICACIÓN DE LA POBREZA
En la conferencia, Valls ha subrayado que Barcelona tiene dos retos, uno "el modelo de ciudad" y otro el debate entre "la democracia representativa y el Estado de derecho frente a los populismos y nacionalismos". También ha asegurado que durante el mandato de Colau la ciudad se ha deteriorado, principalmente en ámbitos como la seguridad, la pobreza y la vivienda. El alcaldable ha recordado que uno de cada cuatro barceloneses ha conocido un acto de delincuencia, ha añadido que "los problemas sociales y de pobreza se han cronificado con . Colau" y ha criticado que de los 8.000 pisos que la alcaldesa prometió antes de las elecciones de 2015 solo entregará entre 700 y 800.
Valls ha abogado también por acabar las grandes infraestructuras pendientes, tanto urbanísticas como de transporte. El candidato ha puesto especial énfasis en las obras de Glòries, en las líneas de metro pendientes (9 y 10) y en la estación de la Sagrera. Sobre este proyecto, Valls ha puesto en duda si podrá inaugurarlo en los próximos cuatro años si es alcalde. Todas las infraestructuras citadas llevan años de retrasos.
CONTRA LA OCUPACIÓN, APLICAR LA LEY
Preguntado sobre la ocupación de unas 3.000 viviendas en Barcelona, Valls ha defendido el cumplimiento de la la ley, aunque también es partidario de promover medidas sociales para garantizar el derecho a un piso. El alcaldable ha recordado que hace unos días unos vecinos de Ciutat Vella llamaron a la empresa Desokupa para sacar a unos ocupas de su casa ante la falta de intervención de los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana, que aseguraron que no podían intervenir. "Esto no puede ser. Hay que buscar la fórmula para actuar y aplicar la ley de forma inteligente".