El gobierno de Ada Colau acaba el mandato con otra decisión polémica que pone en evidencia una vez más la mala planificación municipal. El próximo 15 de junio, el Ayuntamiento de Barcelona ha convocado la primera de las pruebas a las oposiciones para entrar en la Guardia Urbana. El consistorio no podía haber elegido peor fecha. Ese día, la Generalitat hará el primer examen de acceso a Mossos d'Esquadra.
La coincidencia de ambas citas obligará a 800 personas a tener que elegir entre presentarse a uno u otro examen, aunque probablemente la mayoría decidirán seguir la convocatoria para mosso, donde ya tiene dos exámenes superados, ha explicado el secretario general del Sindicato de Agentes de Policía Local (SAPOL), Manel García a a Metrópoli Abierta. El sindicato asegura que la simultaneidad de ambas convocatorias es por la "falta de coordinación, organización e incompetencia por parte del Ayuntamiento".
CAMBIO DE FECHAS
El Departamento de Interior de la Generalitat publicó a principios de mayo el calendario de las pruebas de acceder a la policía autonómica y programó para el 15 de junio el tercer examen para los aspirantes a Mossos (test psicotécnico). Diez días más tarde, explica SAPOL en un comunicado, el Ayuntamiento dio a conocer que el primer ejercicio para la policía local barcelonesa, la prueba cultural, sería el mismo día. Según SAPOL, la coincidencia de las oposiciones ha provocado un conflicto entre el Ayuntamiento de Barcelona y la Generalitat y mucho malestar entre las plantillas de los cuerpos.
Al sindicato policial le cuesta entender que nadie se preocupara por la coincidencia de ambas convocatorias, y más cuando las de Mossos se iniciaron hace cerca de un mes. "Esto va en contra de los derechos de los aspirantes que han pagado con antelación las tasas", afirma SAPOL, que ha presentado una reclamación a la alcaldesa instándola a cambiar las fechas del primer examen de la Guardia Urbana. Requerido por Metrópoli Abierta, el Ayuntamiento dice que si hay cambio de día ya se anunciará.
MÁS DE 3.700 ADMITIDOS
La convocatoria abierta para la Guardia Urbana ofrece 233 plazas -más otras 60 interadministrativas, es decir para otras policías-. Según los datos facilitados por el Ayuntamiento de Barcelona, a la primera prueba han sido admitidos provisionalmente 3.706 aspirantes, mientras que otros 394 han sido excluidos por ahora, en algunos casos por no haber pagado la tasa correspondiente, cuyo precio máximo es de 32,24 euros.