Maragall se abre a aprobar el presupuesto de Colau y Collboni
El edil republicano advierte que no es un cheque en blanco y plantea subir algunos impuestos
9 septiembre, 2019 10:52Noticias relacionadas
Ernest Maragall se abre aprobar el presupuesto municipal para 2020 que el gobierno municipal de Ada Colau y Jaume Collboni presentará este otoño. El líder de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona y ganador de las elecciones municipales del pasado 26 de mayo lo dice en un artículo que firma en La Vanguardia junto con otro regidor republicano, Jordi Castellana.
"Haremos todo lo posible para que Barcelona disponga de los mejores presupuestos, dirigidos a garantizar la prosperidad compartida y sostenible", aunque eso no significa que "sea en cheque en blanco", advierte casi al final.
Farem tot el que sigui possible perquè Barcelona disposi dels millors pressupostos, adreçats a garantir la prosperitat compartida i sostenible. Sense que això sigui un xec en blanc.
— Ernest Maragall i Mira (@ernestmaragall) September 9, 2019
Amb el @jcasteg hem escrit aquest article que publica @LaVanguardia https://t.co/XFqneOx9y6
Tras un mandato, el pasado, en el que no se aprobó ningún presupuesto por la vía ordinaria, Maragall se muestra dispuesto a garantizar la aprobación si las cuentas municipales se enfocan a "cuatro grandes retos: la lucha contra la desigualdad social, con la vivienda en primer plano; el aumento del poder adquisitivo de las clases trabajadoras; el compromiso decidido contra el choque climático, y la mejora de los servicios públicos, empezando por la seguridad y la conviviencia", escriben Maragall y Castellana.
SUBIR ALGUNOS IMPUESTOS
En el texto, los dos regidores defienden subir los impuestos "allí donde no se paga en proporción a los beneficios que una ciudad como la nuestra permite". Maragall y Castellana se refieren "al caso del turismo" y al "uso intensivo del espacio público impulsado por las plataformas digitales". ERC también habla de introducir "ajustes" en el gasto y revisar los programas en curso "para verificar su eficiencia social y económica".
Según Maragall y Castellana, Barcelona necesita unos presupuestos conectados a la realidad que incluyan, para comenzar, "los procedimientos que permitan desplegar políticas de ámbito metropolitano" en cuestiones como el derecho a la vivienda, la movilidad, la seguridad o la conexión formación-trabajo.
Los republicanos reconocen que los retos que plantean no se pueden conseguir en un año y ponen sobre la mesa la necesidad de redactar "una programación presupuestaria" para "todo el mandato". "El presupuesto de un gobierno es la expresión de su concepción política. Sin su concreción se crea el escenario ideal para que impere la ley del mas fuerte en lugar de la inclusión y la cohesión", concluyen.