BComú se salta su código ético con el fichaje de Imma Mayol

La histórica dirigente de Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) Imma Mayol vuelve a casa. Tras su paso por Palma de Mallorca, la veterana política ha sido rescatada por Ada Colau para que gestione las políticas de agua, residuos y energía del Área Metropolitana de Barcelona (AMB). Mayol es toda una conocida de la política barcelonesa. Se estrenó como concejal en el Ayuntamiento de Barcelona en 1999, cargo que abandonó 12 años después, en 2011, después de haber pasado 12 años en el consistorio.

El nuevo fichaje será ratificado este martes, 1 de octubre, durante el pleno del AMB. Asimismo, se hará oficial la renuncia "voluntaria" de Joan Pinyol i Ribas, su antecesor en el cargo, que ejercía hasta ahora como director del área de Ecología del AMB. 

PRESUNTO DELITO MEDIOAMBIENTAL

La repesca de Mayol se ha realizado en uno de sus peores momentos a nivel profesional. La exconcejal de ICV está siendo investigada por la Fiscalía de Medio Ambiente de las Islas Baleares debido a su implicación en un presunto delito medioambiental. 

El caso se remonta a su cargo anterior, cuando Mayol ejerció desde 2015 hasta abril de 2019 como gerente de la empresa pública Emaya, la suministradora de agua de Palma de Mallorca. Un particular denunció que se estaba produciendo un vertido de aguas residuales en la bahía de Palma, lo que podría constituir un delito medioambiental.

Eso es precisamente lo que investiga el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y lo que llevó a agentes del Instituto Armado a registrar el domicilio barcelonés de Mayol en agosto pasado en busca de material informático, según informó El Periódico. 

CONTRADICE AL CÓDIGO ÉTICO

Fuentes de la Guardia Civil confirman a Metrópoli Abierta que Mayol sigue figurando como investigada –lo que equivale a la imputación– en el caso, que está bajo secreto de sumario por orden de un juzgado de instrucción de Palma de Mallorca. 

Su condición de investigada entra en clara contradicción con el código ético de Barcelona en Comú (BComú), partido que ostenta la presidencia del AMB. El documento, aprobado por las bases de la formación, indica en el capítulo dedicado a la Profesionalización de la política, supresión de privilegios y medidas contra la corrupción que "las personas con cargos electos, gerenciales y de libre designación" deben comprometerse a renunciar o cesar "de forma inmediata" de todos los cargos "ante la imputación por la judicatura de delitos relacionados con corrupción, prevaricación con ánimo de lucro, tráfico de influencias, enriquecimiento injusto con recursos públicos o privados, cohecho, malversación y apropiación de fondos públicos, bien sea por interés propio o para favorecer a terceras personas".

En el caso de Mayol, que ostentará un cargo gerencial en el AMB a partir de este martes, no se ha aplicado el código ético de los comunes. De ser así, la exdirigente de ICV hubiera quedado excluida del cargo que se le ha asignado en el AMB.