Los barceloneses suspenden a Ada Colau. Por primera vez desde que llegó a la alcaldía, en junio de 2015, la primera edil de la ciudad no ha aprobado el barómetro municipal, la encuesta municipal que el Ayuntamiento de Barcelona elabora, desde hace 28 años, sobre la situación de la ciudad y la gestión del gobierno de Barcelona. En el barómetro de este diciembre, Colau saca un 4,7. Ésta es la peor nota que la alcaldesa obtiene en cuatro años y medio. En junio de 2015, Colau logró un 5,8.
Entre los líderes políticos, los ciudadanos únicamente aprueban a Ernest Maragall y lo hacen con 5 pelado. Tras el líder republicano, se sítua el socialista Jaume Collboni, con un 4,8, y Colau, con un 4,7. Elsa Artadi, por su parte, logra una puntuación de 4,6, mientras que los líderes de partidos españolistas son los que peores notas sacan. Mariluz Guilarte, de Ciudadanos, obtiene un 3,6; Manuel Valls, un 3,3, y Josep Bou, un 3,2%. Ésta también es la primera vez que el barómetro pone nota a Guilarte, Valls y Bou porque antes no eran concejales.
El barómetro también pone en evidencia que el aumento de los delitos sigue siendo la principal preocupación de los barceloneses. Un 29,1% de los ciudadanos percibe la ciudad como insegura Éste es el tercer barómetro consecutivo en el que la inseguridad se corona como el problema más grave para los ciudadanos. A finales de junio, un 27,4% de ciudadanos subrayó que el aumento de los delitos era el principal problema de la ciudad. Seis meses antes, en diciembre de 2018, la inseguridad era la preocupación mayor para el 21% de los vecinos. El 29,1% es la cifra más alta jamás registrada en las encuestas municipales.
AUMENTO DE HOMICIDIOS
Como ya explicó hace unos días Metrópoli Abierta, el balance de criminalidad de los nueve primeros meses de este año, que elabora el Ministerio del Interior, no es nada optimista. Según los últimos datos oficiales, entre enero y septiembre de este año se han producido en la ciudad 15 muertes violentas, un 66,7% más que en el mismo periodo del año pasado (nueve). También se han incrementado un 11,4% los asesinatos en grado de tentativa -de 35 a 39- y los robos con violencia e intimidación, uno de los delitos que más preocupa a la policía. Éstos han subido un 24,9% y han pasado de 8.672 a 10.833. El total de infracciones penales asciende hasta septiembre a 151.591, un 5,2% más (144.070 en 2018).
La encuesta municipal, para la que se entrevistaron a 831 personas, también pone sobre la mesa que la gran mayoría de loa barceloneses cree que la ciudad ha empeorado. Ahora lo ve así el 67,7% frente al 54,2% del pasado junio. Por contra, el número de vecinos que opina que la capital catalana ha mejorado también va claramente a la baja. Del 27,5% que lo pensaba en junio, ahora lo considera así solo un 15% de la población. La gestión municipal que hace el gobierno de Colau y Collboni tampoco es muy favorable y un 43,6% de los ciudadanos cree que la gestión es mala o muy mala. En junio, el porcentaje de personas que creía que la gestión era mala o muy mala era de un 42,2%. La gente que dice que la gestión municipal es buena o muy buena es del 42,8%, cuatro puntos menos que junio.
PREOCUPA EL ENCAJE DE CATALUÑA CON ESPAÑA
Tras la inseguridad, el encaje de Cataluña en España es el segundo aspecto que más inquieta a los barceloneses. El barómetro municipal se elaboró entre el 26 de noviembre y el 5 de diciembre, con los disturbios postsentencia todavía muy frescos en la memoria de los vecinos, lo que ha hecho que los problemas derivados del proceso independentista hayan subido seis puntos entre las preocupaciones de los ciudadanos. Del 8,9% se ha pasado al 14,9%. Por contra, el acceso a la vivienda, que en junio era el segundo motivo de intranquilidad, ahora baja hasta el cuarto puesto y solo es motivo de inquietud para el 6,5% de la gente. En junio lo era para el 14%.
El gobierno municipal ha preguntado también a los barceloneses por el pacto entre Barcelona en Comú y PSC. Según los resultados del barómetro, un 42,4% de los encuestados lo ve bien y un 5,1% lo valora como muy positivo. En el lado opuesto, un 26,4% de la ciudadanía percibe este acuerdo de gobierno como malo, mientras que un 12,1% sostiene que es un pacto muy malo para Barcelona.
El sondeo también destaca que de haber ahora unas elecciones al Ayuntamiento de Barcelona, ERC ganaría de nuevo las elecciones, y lo haría con una mayor diferencia de lo que lo hizo en mayo, cuando logró el 14,1% de los votos, un porcentaje que no le sirvió para gobernar. El barómetro sitúa a Barcelona en Comú como hipotética segunda fuerza en caso de unos comicios, y lo haría con un 15,5% de los sufragios, 1,8 puntos por encima de lo que los comunes consiguieron en mayo (13,7%). El PSC sería el tercer partido con una mayor representación municipal, pero iría claramente a la baja. Del 12,1 pasaría al 8,9%.
EL CAMBIO CLIMÁTICO
Por primera vez, el gobierno municipal ha preguntado a los barceloneses por el cambio climático y la respuesta ha sido contundente. Un 89% asegura mostrarse muy preocupado o bastante preocupado por este problema. Los barceloneses también responden de una forma muy mayoritaria cuando se les pregunta si el cambio climático puede afectar a su vida mucho o bastante, con un 79,7% del total. En el ámbito de Barcelona, los vecinos sostienen que las principales medidas a tomar para combatir el cambio climático son reducir la emisiones del transporte terrestre (36,9%) y fomentar el reciclaje (13%).