El Ayuntamiento cierra en falso las polémicas oposiciones a intendente
Los aspirantes al alto cargo policial serán nombrados sin esperar a la resolución del recurso que se ha interpuesto contra la convocatoria
26 enero, 2020 00:00Noticias relacionadas
El Ayuntamiento de Barcelona ha cerrado en falso unas polémicas oposiciones a intendente de la Guardia Urbana. Metrópoli Abierta avanzó en exclusiva el pasado 7 de enero que, presuntamente, una convocatoria pública a este alto cargo de la policía local podría no haberse llevado a cabo con la transparencia y la limpieza necesarias. Una persona aspirante presentó un recurso administrativo en el que reclama ver todas las actas de las oposiciones y denuncia que no pudo hacer la revisión de la cuarta prueba en la que quedó eliminado. Fuentes municipales aseguran que existe jurisprudencia que permite seguir adelante con el procedimiento a pesar de que después un juez diga que algo se ha hecho mal.
RECURSO DESESTIMADO
El pasado 16 de enero, el consistorio publicó la propuesta de nombramiento de las seis personas que serán ascendidas a intendente. El punto y final a la convocatoria se ha puesto sin resolver el citado recurso y sin que la citada persona aspirante haya podido hacer la revisión del examen que reclamaba. Fuentes muy directas del caso explican que, si bien el Ayuntamiento tiene tres meses para responder al recurso -se interpuso el 27 de diciembre-, "la decisión de hacer efectivos los nombramientos significa que el recurso se ha desestimado de facto y que entienden que no hay perjudicados". La persona que ha presentado el recurso esperará los tres meses que marca la Ley, pero si tras ellos no obtiene respuesta o la que obtiene no la convence, muy probablemente iniciará un contencioso administrativo contra el consistorio.
Según fuentes de las oposiciones, el recurso se ha interpuesto ante la concejalía de Seguridad que dirige Albert Batlle, es decir que tendría que ser respondido desde este departamento. Hace unos días, un miembro del equipo de Batlle quitó hierro a la presentación del citado recurso argumentando que es algo muy habitual. Tampoco desde la oficina de prensa municipal se respondió a las preguntas de este medio, alegando que el proceso seguía abierto. Metrópoli preguntó al consistorio una batería de cuestiones que no se contestaron, entre ellas si constaba que dos miembros del tribunal, presuntamente, no acudieron a algunos de los exámenes porque no quisieron participar en una "pantomima".
GARANTIZAR LA IGUALDAD
Las miradas en este caso están puestas en una de las dos mujeres aspirantes a intendenta. Supuestamente, detrás del interés de que esta persona llegue al cargo estaría la intención del Ayuntamiento de dotar la cúpula del cuerpo policial de una mayor cuota femenina, apuntan fuentes del consistorio. Actualmente la normativa que rige estos procesos no distingue entre hombres y mujeres y la convocatoria “debe garantizar los principios de igualdad, méritos y capacidad, algo que, presuntamente, podría haberse vulnerado”, añaden fuentes de las mismas oposiciones. La aspirante suspendió el primer examen y fue a revisión, donde aprobó con un 5,06.
La policía se presentó a la oposición abierta por el consistorio barcelonés el 17 de junio del 2019 y firmada por el secretario municipal, Jordi Cases. El concurso ofrecía seis plazas de intendente, tres en turno libre (se podían presentar todos aquellos que cumplieran los requisitos, aunque no fueran miembros de la Guardia Urbana) y tres de promoción interna (solo para agentes del propio cuerpo). La agente se presentó por el turno libre y competía con otras 12 personas, todas miembros de la Guardia Urbana a excepción de una de ellas. El listado de las personas admitidas en la oposición se puede ver aquí. Solo figuran dos mujeres.
SUSPENSO Y REVISIÓN
Según los datos consultados, la aspirante no pasó la primera prueba, que consistió en la resolución de un supuesto práctico relacionado con los principios de actuación y las funciones del cargo de intendente. En el resultado de la prueba, la policía no aparece entre las personas que la superaron. Para ello se necesitaba sacar un 5. Fuentes conocedoras del caso explican que la primera prueba era anónima -es decir no se sabía de quién era cada examen- y que ésta, presuntamente, podría ser la explicación de que la agente no aprobara el examen a la primera. Fuentes del propio Ayuntamiento indican que se aconsejó a la guardia urbana "a que fuera a revisión de examen”. Tras ir, la agente obtuvo una nota de un 5,06. En la documentación oficial se dice que la revisión fue solicitada por “una aspirante”.
La revisión, al igual que el resultado general de la prueba aparece firmado por el secretario del tribunal calificador, Jordi Miró Meix. En el citado documento, la policía, presuntamente, ya aparece identificada con una parte de su DNI, xxx8165xx, al igual que en el resto de pruebas. Entre los miembros del tribunal figuraban el ahora exjefe de la Guardia Urbana, Evelio Vázquez; el intentende mayor, Ricardo Salas; y la intendente de la Guardia Urbana, Marta Pons, ahora en la Generalitat en comisión de servicios como subdirectora general de Coordinación de la Policía de Cataluña. Según ha podido saber este medio, a través de fuentes del Ayuntamiento y del propio cuerpo policial, como mínimo dos personas del tribunal no habrían hecho acto de presencia en alguno de los exámenes para no formar parte de "una pantomima". En el resto de exámenes, la persona con el DNI xxx8165xx aprobó sin problemas.
SIN NOMBRE NI APELLIDOS
En la propuesta de nombramiento publicada en la web de oferta pública, los aspirantes que serán nombrados intendentes aparecen identificados solo con el DNI. Entre las seis personas que han superado las pruebas figura la titular del DNI xxx8165xx en tercer lugar del turno libre. En este caso llama poderosamente la atención que los futuros intendentes no aparecen con el nombre completo. Fuentes de las oposiciones afirman "que es la primera vez que se hace así y que obedece a una voluntad de mantener este proceso en el máximo anonimato". Este medio ha podido comprobar que, al menos, en las dos últimas oposiciones, las personas que superaron las pruebas aparecen en la propuesta de nombramiento con los nombres y los apellidos. Sucedió así tanto en el caso de las oposiciones a intendente mayor como en las de agente raso. Debajo de estas líneas se puede ver una imagen con el nombre de las dos personas que fueron nombradas intendente mayor en diciembre, Benito Granados y Pedro Velázquez, que ahora es el nuevo jefe de la Urbana.
VULNERAR LAS BASES
A las citadas oposiciones a intendente de la Guardia Urbana se podían presentar todas aquellas personas ajenas al cuerpo que cumplieran con los requisitos. En los casos de procesos a inspectores, intendentes o intendentes mayores, por decreto, el Ayuntamiento puede reservar el 50% de las plazas para promoción interna. Fuentes de la citada oposición opinan que algunos de los exámenes podrían haber vulnerado las bases de la convocatoria. A modo de ejemplo explican que en la cuarta prueba se preguntó por un caso específico de la Guardia Urbana, algo que, en su opinión, no se podía hacer al tratarse de una convocatoria abierta a todos aquellos que cumplan con los requisitos, aunque no pertenezcan a la policía local barcelonesa, ya que de esta manera se estaba dando ventaja a los miembros de la policía local barcelonesa. “En la cuarta prueba lo que se preguntó no es lo que se decía en las bases. El temario tiene que ser general. Parecía que de esta manera se buscara sacarse de encima a alguno de los aspirantes”, concluyen.