Vox ha inaugurado este sábado sin contratiempos su nueva sede en Barcelona, la segunda en Cataluña. El partido de extrema derecha ha celebrado un acto en sus nuevas oficinas en el número 28 del Camp del distrito de Sarrià - Sant Gervasi, delante del club Empel, lugar de reunión de diversos grupos de esta ideología.
Un dispositivo de seguridad de los Mossos d'Esquadra con varias furgonetas de agentes antidisturbios ha velado para evitar cualquier enfrentamiento ante una posible protesta contra el partido de Santiago Abascal como ha ocurrido en varias ocasiones en Cataluña con grupos antifascistas y ciudadanos que rechazan el marco ideológico de la extrema derecha.
PRESENCIA DE ORTEGA SMITH
El secretario general del partido, Ortega Smith, ha acudido al acto de inauguración y se ha fotografiado con decenas de simpatizantes que le esperaban en la entrada. "¡Por Cataluña y por España!", ha gritado Smith justo antes de retirar una bandera de España que cubría la placa de la nueva sede. Durante su intervención, junto al presidente de Vox en Barcelona, Ignacio Garriga, Smith ha avisado que, si es necesario, la Guardia Civil debería arrestar a Quim Torra, por no cumplir la inhabilitación impuesta por la Junta Electoral.
Varias banderas rojigualda decoraban esta mañana la calle Del Camp, donde se han acercado un grupo reducido de personas, una decena, con banderas LGTBI al grito de "fuera fascistas de nuestros barrios". Finalmente, la convocatoria de la Plataforma Antifeixista a través de las redes para intentar boicotear el acto ha pinchado y no ha logrado la repercusión que buscaba.
En las próximas elecciones catalanas, la formación espera superar los 243.026 votos que obtuvo en Cataluña en las últimas elecciones generales del 10 de noviembre de 2019. Estos resultado le otorgaron dos diputados en el Congreso de los Diputados. El partido fue el séptimo más votado, por delante de Ciudadanos, con 30.000 votos menos, PACMA y Más País.
LA PRIMERA SEDE, EN TARRAGONA
Vox abrió su primera sede en Tarragona en 2018. La apertura del local ha originado varias protestas por grupos antifascistas de la ciudad y CDR y la puerta acristalada de la seda ha aparecido en varias ocasiones con pintadas en contra de la formación.