La campaña de Navidad del Ayuntamiento de Barcelona será responsabilidad de Events, la empresa que escondió en una de sus naves 2,5 millones de papeletas para votar el 1 de octubre de 2017, así como 4 millones de sobres. La firma se ha implicado también oficialmente en actos de cariz independentista (como un homenaje a Lluís Maria Xirinacs) junto a la empresa Arriska, de Joel Joan, o algunas otras compañías vinculadas a independentistas de pro. Uno de sus últimos actos más conocidos fue la preparación del gran mitin de Carles Puigdemont en Perpignan el pasado 28 de febrero, poco antes de que se decretase el estado de alarma por la pandemia del coronavirus.
Los contratos millonarios con la Generalitat independentista no son secretos: Events ha recibido millones de euros en adjudicaciones públicas de Presidencia, en muchas ocasiones con contratos relacionados con la logística de la Diada. Esta compañía fue, precisamente, la que organizó el acto reivindicativo de Òmnium Cultural en el Paseo Lluís Companys este 11 de septiembre, por el que pasaron, entre otros, el president Quim Torra, el vicepresidente, Pere Aragonès, el presidente del Parlament, Roger Torrent, el líder de la oposición municipal, Ernest Maragall, o la presidenta de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Elisenda Paluzie.
DE MANOLO ESCOBAR AL SEPARATISMO
Events es una empresa de Toni Fusté y Roc Aguilera. El primero, que heredó la firma Radio Fusté de su padre (había sonorizado durante décadas actos de artistas como Rudy Ventura, Manolo Escobar o Xavier Cugat), la reconvirtió en 2007 en Events. Fue cuando entró Aguilera como socio. Fusté era también socio de Trotemi, una firma en liquidación con importantes adjudicaciones del Gobierno catalán donde tenía como socio a Oriol Soler, uno de los gurús del independentismo, que participa en proyectos como el diario Ara o Zero4 Cultura en Directe.
La firma del contrato fue el pasado 8 de septiembre y, con ello, Events se embolsará la nada despreciable cifra de 224.455 euros (curiosamente, una cantidad sensiblemente superior a la de la organización de la Diada). El contrato de Events establece que la compañía independentista ha de realizar “la conceptualización, programación, coordinación, producción, ejecución, difusión y evaluación de las acciones de la campaña de Navidad en apoyo del comercio de proximidad”.
APUESTA POR EL COMERCIO DE PROXIMIDAD
Un informe realizado por el Ayuntamiento de Barcelona explica que el objetivo de la misma es “descentralizar la oferta de actividades de Navidad en la ciudad y exportar hacia los barrios, vinculando esta campaña al comercio de proximidad y ofrecer mediante esta propuesta una oferta variada y de calidad de servicios”. La campaña dependerá de la dirección de Comercio, Restauración y Consumo.
El pliego de prescripciones técnicas del propio consistorio explica también que “el Ayuntamiento de Barcelona quiere mantener vivo y competitivo el modelo de comercio preservando la proximidad y su competitividad, prestigiando la carrera profesional del comerciante, favoreciendo el relevo generacional, situando la innovación como eje vertebrador, fortaleciendo la relación del comercio con otros sectores económicos para fomentar la creación de ocupación e impulsar la compra y el consumo responsable”.
REUNIR EL MÁXIMO DE GENTE
Así pues, este año se pretende fomentar “una oferta de actividades culturales, lúdicas, científicas y deportivas de calidad en las zonas comerciales de la ciudad. La intención es crear un hilo conductor que ponga en relación las actividades que se realicen en la zona central de la ciudad con las zonas comerciales de los diferentes distritos de la ciudad, de manera que la campaña de Navidad tenga coherencia en toda la ciudad”. Y, para ello, se quiere que los vecinos prioricen las tiendas cercanas a sus domicilios antes de desplazarse a otros barrios.
La campaña comenzará a ponerse en práctica el 27 de noviembre, un día después del encendido de las luces navideñas, y finalizará el 3 de enero de 2021. Se prevén 10 actividades por distrito y, según las consignas municipales, se dará prioridad a las propuestas “que contengan valores vinculados al consumo responsable, el comercio de proximidad, el hecho cultural, el aprendizaje, la expresión corporal, la solidaridad o la no competitividad”. Esas actividades se llevarán a cabo principalmente en espacios exteriores o proximidad de los mercados, aunque también en el interior de los mismos. Su finalidad es “garantizar la máxima afluencia de público a las actividades programadas”.