Barcelona destina 209.000 euros al ocio ‘solidario’ de niños de Les Corts

La empresa Relleu Cultural, creada en 2017, será la encargada de llevar la gestión de la ludoteca Guitard, ubicada en la calle del mismo nombre, en el distrito de Les Corts. La gestión durante los dos próximos años (hasta 2023) costará a las arcas municipales 209.090 euros y puede ser prorrogada por otros dos años (es decir, que acabaría en el 2025) si el Ayuntamiento lo decide, sin que la compañía pueda negarse. En ese caso, la cantidad a desembolsar por parte del consistorio se doblaría.

Relleu cultural es una compañía del mismo grupo empresarial que Calaix de Cultura, una de las grandes beneficiarias de contratos públicos del Ayuntamiento barcelonés. Esta firma gestiona algunos de los centros cívicos y espacios municipales más emblemáticos de Barcelona, como la Casa Golferichs, la Casa Elizalde, el centro de Fort Pienc, el de Vallvidrera Vázquez Montalbán, La Sedeta, Baró de Viver, o el del Barri Can Rectoret. Relleu Cultural y Calaix de Cultura comparten domicilio, pero en la misma sede se encuentra la firma Ludic 3 SCCL, que también tiene adjudicaciones municipales.

VARIOS CONTRATOS LOS ÚLTIMOS AÑOS

Curiosamente, el Ayuntamiento pagó a Relleu Cultural 2.868 euros por actividades de dinamización del centro cívico La Sedeta durante el mes entre mayo y junio del 2020, en pleno estado de alarma, aunque ese centro está gestionado por Calaix de Cultura, la compañía hermana. Durante el año pasado, también percibió 16.498 euros del Distrito del Eixample por “organizar y dinamizar actividades culturales para jóvenes”. Asimismo, percibió 1.200 euros por un servicio de gestión de dinamización del servicio de acogida de niños, del Distrito de Ciutat Vella.

En el 2019, Relleu Cultural obtuvo un total de 9 contratos menores del consistorio barcelonés, que sumaron 409.702 euros. Por su parte, Calaix obtuvo 15 contratos que sumaron 4.032.179 euros, mientras que la cooperativa Ludic 3 se quedó con cinco contratos por un monto de 61.216 euros.

ELIMINAR JUGUETES SEXISTAS

Una de los principales objetivos del contrato de gestión de la ludoteca Guitard es implicar a las familias en la práctica del juego y “educar en hábitos positivos para el consumo de juguetes entre familias y orientarlas en a compra de los mismos, que no fomenten valores sexistas ni violentos”. Esta ludoteca es un equipamiento municipal que ofrece un servicio educativo en el ocio a través del juego y los juguetes. Sus actividades se dirigen, preferentemente a niños de 0 a 10 años y a las familias del barrio, aunque la intención de los responsables municipales es que también implique a las escuelas y a entidades del ocio cercanas.

Un informe municipal justificativo del contrato explica que “el objetivo principal es garantizar el derecho del niño al juego y contribuir así en su desarrollo integral”. Además, trata de ofrecer un espacio “favorecedor de la imaginación, la creatividad y el espíritu lúdico”. Los juegos y recursos empleados, según ese informe, deben “favorecer actitudes solidarias y de aceptación de la diferencia, fomentando la educación en los valores de la coeducación, los derechos humanos, la cohesión social y la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres”.

HÁBITOS SOCIALES

Según las bases del contrato, la gestora de la ludoteca debe garantizar la práctica de hábitos, capacidades, actitudes y valores que permitan a los niños “crecer de manera armónica en las áreas de desarrollo motriz, cognitivo, afectivo y social desde una vertiente cívica, cultural e inclusiva”. Así, al mismo tiempo que se debe potenciar la autonomía de los infantes, se ha de posibilitar la relación entre niños y adultos, favoreciendo “la inclusión y participación de los niños con discapacidad física, psíquica o sensorial”, así como favorecer la relación entre niños de diferentes culturas y procedencias”.

Otro de los puntos es la recuperación de juegos tradicionales y educar a los usuarios en la sostenibilidad, el reciclaje y el respeto, promoviendo “que puedan jugar a lo que quieran independientemente de su sexo”. En esa línea, también se han de incorporar juegos “que promuevan la igualdad y la cultura de la paz”.

TIPOS DE JUEGOS

Para posibilitar estas líneas estratégicas, el servicio de ludoteca dispondrá de un espacio familiar (para niños de 0 a 3 años), en el que se ofrecerá “un servicio de espacio familiar y crianza compartida con el espacio adaptado a las necesidades de las actividades. Para los más pequeños, el servicio deberá incorporar a un adulto familiar responsable y se ofrece en horario de mañana.

Para los niños de 4 a 10 años, se desarrollarán varias clases de juegos: el juego libre (el eje principal de la actividad); el juego de ejercicio (comporta un alto contenido sensorial y motor y en él se incluyen juguetes como caleidoscopios, espejos, cubos apilables, triciclos, sonajeros, etcétera); el juego simbólico (juguetes con los que el niño puede imitar acciones de la vida cotidiana del mundo de los adultos); el juego de construcción o disposición (son juegos de construcción con bloques, con piezas, con herramientas reales y que implican la capacidad de razonar); y el juego de reglas (juegos en los que se han de respetar una serie de normas).

La ludoteca tendrá también un servicio de préstamo, que consistirá en que el niño se puede llevar a su casa o a su escuela juegos y juguetes. El centro también dispone de un espacio de patio para poder desarrollar las actividades al aire libre. A lo largo del año, la ludoteca puede realizar actos en fiestas señaladas, como las de Carnaval o la fiesta mayor, así como organizar visitas programadas. Como consecuencia de la crisis sanitaria, la prestación de los servicios estará sujeta a las medidas de prevención fijadas por las autoridades sanitarias.