El Ayuntamiento de Barcelona ha localizado una brecha de unos 18 millones de euros en impuestos no declarados de hasta 64 salas de juego que se encuentran en la capital catalana.
A dicha cuantía hay que sumar otros 400.000 euros adicionales en concepto de intereses, además de las sanciones, según ha avanzado El Periódico.
INSPECCIONES
El resultado es fruto de las inspecciones intensificadas que lleva a cabo el consistorio desde 2016 con el objetivo de detectar fraude fiscal de grandes empresas en ámbito local.
Durante el pasado mandato, el consistorio detectó una brecha de 69 millones de euros defraudados por estas compañía en el marco del plan municipal contra el fraude fiscal en Barcelona.