El próximo 3 de junio tendrán lugar las elecciones para elegir la junta directiva del Colegio de Abogados de Barcelona (Icab). Tres candidaturas compiten por ver quién se lleva el gato al agua: Maria Eugènia Gay, la actual decana, que quiere repetir mandato; Gonçal Oliveros, que se presenta como lista alternativa; y Vanessa González, la última en presentar lista y la que, a priori, tiene menos posibilidades. La tensión es máxima: para este jueves estaba previsto un debate electoral que fue suspendido debido a la tensión política, según denuncian los rivales de la actual junta. Destacados independentistas, como el exdecano y actual diputado de JxCat Jaume Alonso-Cuevillas, llegó a acusar a Maria Eugènia Gay de “crispar” la campaña por no avenirse a debatir.
Cuevillas, junto a otros letrados identificados con el independentismo y la propia candidatura de Oliveros, también exigen a Gay y a su junta que opinen sobre el informe emitido por el Tribunal Supremo posicionándose contra los indultos a los condenados por el 1-O.
En algunos círculos se presenta el embate del Icab como un duelo entre constitucionalistas e independentistas, asimilando los primeros a la lista de Gay y los segundos a la de Oliveros. Pero hay muchos matices a la hora de englobar las candidaturas en una sola opción. Maria Eugènia Gay parte con el sello de ser la candidatura continuista. La veterana letrada presenta como promesas cumplidas en los últimos 4 años el abaratamiento de las cuotas un 50% los dos primeros años de colegiación y para los abogados que lleven 43 y 45 años de oficio, el establecimiento de formación para los colegiados, la puesta al día en los pagos del turno de oficio, la transformación digital del Colegio la negociación de una nueva póliza de responsabilidad civil que pasó de 100 euros por año a sólo 50 euros, avances en la conciliación laboral o la elaboración de un plan de igualdad.
NUEVAS PROPUESTAS
Ahora, la decana reincidente propone crear un Observatorio de Derechos de la Persona, otro de Insolvencia Personal, dar más ayudas a los jóvenes abogados y regular sus salarios cuando trabajen por cuenta ajena, impulsar más ayudas al turno de oficio, crear nuevas salas de videoconferencias en las prisiones, crear un clúster jurídico que haga al Icab referencia en I+D+i, realizar más formación gratuita y más congresos sobre diferentes materias (cláusula rebus, crédito revolving, segunda oportunidad, vivienda social…), crear una comisión de promoción y estudio del Derecho Civil catalán, dar prioridad al catalán en los juzgados o potenciar un plan de igualdad integral en el Icab.
Desde la oposición, se critica lo que llaman “triunfalismo” de la actual decana y acusan a la actual junta de poco transparente, de no haber hecho nada en materia de igualdad, de luchar poco por los abogados del turno de oficio, de no dar servicios a los letrados, de no dar explicaciones en qué se ha gastado casi un millón de euros y de no tener en cuenta las necesidades de los colegiados. “Al colegio le falta empatía con los colegiados”, se quejan.
UN IVA DEL 10%
La candidatura de Oliveros presenta como actuaciones prioritarias garantizar el uso del catalán en la justicia, la implantación del voto electrónico, dar más servicios a los abogados, crear una oficina de asesoramiento colegial, crear una oficina de apoyo a las abogadas y crear una guardería en la Ciudad de la Justicia para las letradas con hijos pequeños, crear otra oficina de atención a los colegiados afectados de Covid y ayudarles a superar su situación, proponer un IVA del 10% para los servicios de la abogacía, al considerarla un servicio esencial, e implicar más al Colegio en los temas de actualidad.
Vanessa González, por su parte, propone la dignificación de la profesión, manteniendo la neutralidad ideológica del Colegio, dignificación del turno de oficio, reducción drástica del gasto colegial superfluo y rebaja de las cuotas colegiales, abaratar los másteres y los cursos de formación, negociar nuevas pólizas de responsabilidad civil, negociar ayudas públicas para autónomos y despachos pequeños y medianos o el establecimiento de nuevos criterios de honorarios.
UNA LISTA CON INDEPENDENTISTAS
La importancia de estas elecciones reside en si realmente el soberanismo espera dar la campanada y conquistar esta institución para ponerla al servicio de determinados intereses políticos. De hecho, se había asimilado la candidatura de Gonçal Oliveros como la “lista independentista” frente a la continuista de Gay. El aspirante a decano lo niega. “No es una lista independentista o soberanista. “Queremos un colegio fuerte y sólo pensamos en nuestros colegiados”, subraya Oliveros. En su lista figura sólo un destacado soberanista, Sergi Blázquez, presidente de la plataforma Drets, aunque hay otros miembros alineados con el independentismo como Teresa Vallverdú, Assumpció Martínez, Ramon Estebe, Lluís Mestres o Mireia Casals. Sin embargo, también hay otros miembros de su futura junta que no lo son, como el exmagistrado Elpidio Silva.
Se había barajado la posibilidad de que integraran la candidatura independentistas como Jordi Domingo García-Milà o Jaume Alonso-Cuevillas, el abogado de Carles Puigdemont y actual diputado de JxCat. Finalmente, no se integraron en la lista, pero Cuevillas ya hizo público que él votará la candidatura de Oliveros y Domingo ha hecho campaña en las redes sociales por esta candidatura. Pol Olivet, otro de los integrantes, criticaba ante la suspensión del debate de este jueves que “será la primera vez en la historia que en unas elecciones al Icab no se celebra un debate electoral. La abogacía tiene la palabra como herramienta. Negar su uso es negar la esencia de la abogacía”. Su mensaje fue difundido por Domingo y otros destacados soberanistas.
MOJARSE EN POLÍTICA
Desde la candidatura de Oliveros se niega que la lista sea patrocinada por alguna plataforma soberanista. En realidad, se llegó a afirmar que la suya era la lista de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), que ha auspiciado candidaturas a varias instituciones, como la UB, la UPC, la Pompeu Fabra o la Cámara de Comercio de Barcelona. Pero tanto la composición de la lista como las circunstancias son muy diferentes a esos ejemplos.
Sin embargo, hay otra cuestión que alimenta ese discurso de “lista soberanista”: uno de los reproches que lanza esta candidatura a la de Gay es que en los temas políticos, el Icab ha mantenido un perfil bajo, sin tomar partido. “Debemos opinar dentro del ámbito jurídico en todos los temas, porque interesan a la sociedad. Eso no quiere decir que seamos soberanistas. Somos desacomplejados. Si el Colegio de Médicos opina sobre la pandemia desde el punto de vista médico, ¿porqué el Icab no puede opinar sobre los temas político-judiciales desde el punto de vista jurídico? Nosotros tenemos la capacidad de opinar como Colegio y no hacer como ha hecho la actual junta, que con todo lo que ha pasado en Cataluña ha mirado hacia otro lado. En todos los temas trascendentales ha de haber una opinión jurídica”, aducen al alimón Gonçal Oliveros y la candidata a vicedecana en su candidatura, Anna Boza. Y esta última apostilla: “No venimos a hacer política, sino a trabajar por la profesión y somos conscientes de que el Colegio es plural”.