Los puntos de recarga de coches eléctricos, solo en aparcamientos, talleres y concesionarios

El Ayuntamiento de Barcelona ha dado luz verde a la regulación de la implantación de instalaciones para la recarga de coches eléctricos, después de aprobar hace justo un año la limitación de nuevas gasolineras de carburante. De este modo, el consistorio espera favorecer la transición ecológica.

Tal y como ha avanzado la alcaldía, las estaciones de recarga deberán estar ubicadas dentro de parkings, talleres y concesionarios. Así que no se podrán abrir puntos de recarga en la calle del mismo estilo que las gasolineras tradicionales.

Aunque esto no significa que no vaya a haber puntos de recarga en la calle a modo de gasolinera, y es que según ha explicado Janet Sanez, teniente de alcaldía de Ecología, la normativa prevé que puedan transformarse en dispensadores para los vehículos eléctricos. También habrá excepciones para instalar nuevos puntos en la vía pública: se podrán poner en el entorno de las rondas, Nus de la Trinitat, polígonos de Zona Franca y Besòs, y zonas del Carmel, Can Baró, Font d'en Fargues, Guinardó y Sant Martí.

PUNTOS DE RECARGA PÚBLICOS HASTA 2041

En total, el consistorio espera que Barcelona llegue a tener 660 puntos de recarga para vehículos eléctricos. Esto es, seis veces más que en la actualidad, con 113 puntos en toda la capital.

En el caso de los puntos de recarga públicos, el Ayuntamiento prevé mantenerlos pero solo hasta 2041, dentro de 20 años. Además se pueden continuar instalando hasta 2031, diez años antes de su fin.

INTERCAMBIO DE BATERÍAS

Por otro lado, Barcelona pretende impulsar las estaciones de intercambio de baterías para coches y motos, que se podrán construir en todos los parkings de rotación y centros comerciales. En el caso de los puntos de intercambio de baterías para bicis y patinetes, estarán ubicados en cualquier local, fuera del espacio público.